La reciente decisión del Consejo de Ulemas de la Administración Espiritual de los Musulmanes de Rusia ha generado un intenso debate en el país. Este organismo ha emitido una fatwa que permite a los hombres musulmanes contraer múltiples matrimonios religiosos, con un límite de hasta cuatro esposas. Aunque esta práctica se alinea con las tradiciones islámicas, contraviene la legislación civil rusa, que prohíbe la poligamia.
El muftí de Moscú, Ildar Alyautdinov, explicó que la nueva regulación establece que un hombre puede comprometerse a la poligamia siempre que garantice un trato equitativo hacia todas sus esposas. Esto incluye asegurar un apoyo financiero igual, proporcionar vivienda separada para cada esposa y dedicar el mismo tiempo a cada una, de acuerdo con un horario acordado. Esta medida ha suscitado críticas desde diversos sectores de la sociedad rusa.
Reacciones a la fatwa
Nina Ostanina, presidenta del Comité de la Duma Estatal sobre Familia, Mujeres y Niños, ha manifestado su preocupación, subrayando que Rusia es un estado secular donde todos los ciudadanos, independientemente de su afiliación religiosa, deben cumplir con las leyes civiles. En declaraciones al medio Gazeta.ru, Ostanina insistió en que la fatwa contradice la Constitución rusa y la legislación familiar, que define el matrimonio como una unión entre un hombre y una mujer.
Kirill Kabanov, miembro del Consejo para el Desarrollo de la Sociedad Civil y los Derechos Humanos, también ha criticado la decisión, advirtiendo que tales pronunciamientos religiosos podrían socavar el marco legal secular del país. En su canal de Telegram, Kabanov sugirió que el siguiente paso lógico podría ser el rechazo o la no reconocimiento del sistema judicial ruso, así como la posible introducción de tribunales de Sharia.
Por su parte, la Iglesia Ortodoxa Rusa rechaza la poligamia. Vakhtang Kipshidze, vicepresidente del Departamento Sinodal, afirmó que la civilización cristiana se basa en la monogamia, que asegura la dignidad igualitaria de hombres y mujeres en el matrimonio. A pesar de que la poligamia se practica en algunas regiones de Rusia, especialmente en las repúblicas musulmanas del Cáucaso Norte, sigue siendo ilegal según el Código Familiar ruso. Sin embargo, no existen sanciones específicas para quienes practiquen la poligamia en el país.
En respuesta a las críticas, Alyautdinov defendió la fatwa, argumentando que su objetivo es proteger los derechos de las mujeres en los matrimonios religiosos sin infringir la ley civil rusa. En un mensaje en video, aclaró que la fatwa se centra en las prácticas religiosas y busca garantizar la protección de mujeres y niños dentro del matrimonio religioso, abordando situaciones en las que podrían carecer de protección.