Fernando Botero Zea asumió hace un año la labor de difundir los trabajos de su padre, el maestro Botero, por todo el mundo, tras el trágico fallecimiento del artista. Como parte de esta misión, ha inaugurado en el Palazzo Bonaparte de Roma una cuidada exposición, como homenaje póstumo al escultor y pintor.
Junto a sus hermanos, Fernando Botero Zea está centrado en la organización de exposiciones y la gestión del vasto patrimonio que dejó su padre, con el objetivo de que su legado continúe. En una entrevista concedida al diario La Nación, Botero Zea habla de arte, de Colombia y de su compromiso familiar.
Fernando Botero Zea: “En Roma celebramos el legado de mi padre tras su partida”
La primera gran exposición sobre el legado del maestro Botero se ha llevado a cabo en Roma, en el famoso Palazzo Bonaparte. El objetivo de Fernando Botero Zea y sus hermanos en la organización de esta exposición es realizar un recorrido por las diferentes etapas de su carrera. Para ello, se han seleccionado piezas emblemáticas.
“Esta exhibición buscaba destacar la esencia y los matices de la obra de mi padre”, cuenta Botero Zea. “A diferencias de otras exposiciones, el enfoque en Roma fue celebrar su legado tras su partida, integrando piezas que habían estado en colecciones privadas y que no se habían visto en décadas”. Así, se ha logrado una muestra íntima, que busca conectar la obra con la de los grandes maestros de la historia del arte.
“Entre las obras más destacadas de esta exposición se encuentran el Homenaje a Mantegma y La Menina de Botero, una pieza que mi padre nunca firmó”, afirma Fernando Botero. El Homenaje a Mantegma fue una obra creada por el maestro Botero en 1958, y que ha estado desaparecida más de 40 años. La reinterpretación del fresco de renacentista de Andrea Mantegna fue descubierta en una venta privada, y gracias a eso pudo ser incluida en la muestra del Palazzo Bonaparte. Por otra parte, La Menina de Botero es la reinterpretación de un cuadro de la infanta Margarita Teresa de Austria, en la que el Maestro incorporó las influencias de Velázquez y sus cartas de enseñanza. “Resultó en una obra que mi padre consideró tan fiel que decidió no firmarla”.
Exposiciones por todo el mundo
La vida de Fernando Botero Zea se ha vuelto, si cabe, aún más atareada desde el fallecimiento de su padre. Junto a sus hermanos está organizando diferentes exhibiciones de la obra del Maestro Botero. “Nuestro compromiso como familia es asegurar que su legado continúe inspirando a las nuevas generaciones y mostrando su arte en diferentes rincones del planeta”. Este compromiso les llevará a organizar muestras en ciudades como Basilea, Bakú o Singapur.
Pero tampoco olvida Fernando Botero Zea su compromiso con el pueblo de Colombia, tanto en las diferentes exposiciones internacionales, como promocionando la obra del Maestro Botero en su país natal. De hecho, se ha anunciado que la famosa escultura la Mujer Reclinada será instalada en un edificio en construcción de Neiva.