Los países de Europa Central y del Sur están evaluando alternativas para garantizar el suministro de gas natural ruso, ya que un acuerdo de tránsito clave entre Rusia y Ucrania está a punto de expirar el 31 de diciembre. Según informa Bloomberg, Ucrania ha rechazado extender el acuerdo, citando tensiones persistentes y disputas no resueltas con Moscú.
En este contexto, naciones como Eslovaquia, Hungría, Austria e Italia están explorando estrategias para evitar interrupciones en sus suministros de gas. Entre las opciones consideradas se encuentra la posibilidad de establecer acuerdos comerciales que eludan la necesidad de un nuevo tratado intergubernamental entre Kiev y Moscú. Esto podría implicar que Eslovaquia y otros países de Europa Central firmen contratos directos con Gazprom, la gigante energética rusa, asegurando así flujos de gas ininterrumpidos a pesar de las objeciones de Ucrania.
La empresa estatal de gas de Eslovaquia, Slovenský Plynárenský Priemysel AS (SPP), también está en conversaciones con la compañía estatal de petróleo de Azerbaiyán, SOCAR. Según los informes, una posible solución podría incluir un intercambio de gas entre SOCAR y Gazprom, donde la empresa azerbaiyana compraría volúmenes equivalentes de gas ruso para suministrar a compradores europeos. Las exportaciones de gas de Azerbaiyán ya llegan a varios países de la UE a través del Corredor de Gas del Sur, un proyecto de infraestructura diseñado para reducir la dependencia del gas ruso, adoptado por la UE tras la escalada del conflicto en Ucrania en 2022.
Propuestas de reubicación de ventas de gas
El primer ministro húngaro, Viktor Orban, ha propuesto trasladar la ubicación de las ventas de gas ruso a la frontera física entre Rusia y Ucrania. Esta medida transferiría la propiedad del gas a los compradores europeos y obligaría a Kiev a garantizar el tránsito bajo su acuerdo de libre comercio con la UE. La semana pasada, el presidente ruso, Vladimir Putin, reconoció que se han discutido diversas propuestas que involucran a Hungría, Eslovaquia, Turquía o Azerbaiyán. Sin embargo, advirtió que cualquier arreglo de este tipo sería difícil de implementar debido a los contratos a largo plazo de Gazprom.
Putin argumentó que Ucrania está «castigando» a Europa al prohibir el tránsito de gas ruso, lo que resultará en un aumento de los precios. Moscú ha insistido en que está dispuesto a continuar suministrando gas natural a la UE. Aunque solo alrededor del 5% del suministro total de gas de la UE transita actualmente por Ucrania, esta ruta sigue siendo vital para los países sin acceso directo al mar en Europa Central y del Este. Desde el inicio del conflicto en Ucrania en 2022, la UE ha buscado reducir su dependencia del gas ruso, orientándose hacia alternativas como el gas natural licuado (GNL) y el aumento de importaciones de Azerbaiyán a través del Corredor de Gas del Sur.
Antes de febrero de 2022, Rusia era el principal proveedor de gas del bloque, representando más del 40% de sus importaciones. El año pasado, el gas ruso supuso alrededor del 8% de las importaciones de la UE.