El campeonato mundial de ajedrez rápido ha marcado un hito en su historia al otorgar el título de campeón del mundo de blitz 2024 a los grandes maestros Magnus Carlsen e Ian Nepomniachtchi. Esta decisión, sin precedentes, se tomó tras siete partidas en las que ninguno de los dos jugadores logró imponerse, lo que llevó a una solución innovadora en el ámbito competitivo del ajedrez.
La propuesta de compartir el título fue formulada por Carlsen, después de que tres partidas consecutivas terminaran en empate durante los desempates a muerte súbita. Este formato de juego rápido, que se utiliza para determinar un ganador en situaciones de empate, mostró la habilidad y el talento de ambos jugadores. Carlsen, el campeón mundial en cinco ocasiones, comenzó la final con fuerza, ganando las dos primeras partidas y poniendo presión sobre Nepomniachtchi. Sin embargo, el gran maestro ruso logró recuperarse, ganando las siguientes dos partidas y equilibrando la contienda en 2-2.
La Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) compartió un video a través de la red social X, donde se puede ver a Carlsen proponiendo la idea a Nepomniachtchi, quien aceptó la propuesta, sellando el acuerdo con un apretón de manos. “¡Hoy se ha escrito historia!”, declaró la FIDE, al anunciar que ambos jugadores serían reconocidos como campeones.
Controversias en el mundo del ajedrez
La decisión de compartir el título ha suscitado críticas, especialmente del gran maestro estadounidense Hans Niemann, quien ha acusado a la FIDE de estar influenciada por un solo jugador, refiriéndose a Carlsen. Niemann expresó su indignación en un post en X, señalando que la organización parece no tener la intención de ser imparcial y que sus decisiones parecen estar alineadas con los deseos de Carlsen.
Esta controversia se produce en un contexto en el que Carlsen fue descalificado de la competición en Nueva York la semana pasada por no cumplir con el código de vestimenta, que prohibía el uso de jeans. Sin embargo, la FIDE rápidamente relajó esta norma, permitiendo a Carlsen participar nuevamente en el torneo. El presidente de la FIDE, Arkady Dvorkovich, afirmó que se consideraría permitir “jeans apropiados” junto con una chaqueta y otras “pequeñas desviaciones elegantes” del código de vestimenta.
La decisión de dividir el título también fue criticada por la maestra FIDE Alexandra Botez, quien argumentó que el ajedrez se está volviendo “blando” ante situaciones que antes requerían una resolución más contundente. Este tipo de comentarios refleja una preocupación creciente en la comunidad ajedrecística sobre la dirección que está tomando el deporte y la influencia que ciertos jugadores pueden tener en las decisiones de la FIDE.
