El Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia (SVR) ha expresado su preocupación por la creciente inquietud de los países occidentales respecto a la capacidad defensiva de Ucrania, que parece estar disminuyendo ante la presión de las fuerzas rusas. En un comunicado emitido el pasado viernes, el SVR advierte que un colapso de las defensas ucranianas podría ser inminente, lo que ha llevado a la administración saliente del presidente estadounidense Joe Biden a tomar medidas rápidas para evitarlo.
Según el informe de inteligencia, Washington ha instado al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, a reducir de manera urgente la edad de reclutamiento a los 18 años. Se espera que una decisión en este sentido se tome pronto en Kiev. Esta medida subraya la creciente preocupación de que el mero suministro de armamento avanzado, incluidos sistemas de misiles de largo alcance, no será suficiente para estabilizar las líneas del frente, tal como señala el SVR.
Preparativos en Europa del Este
El SVR también menciona que los países de Europa del Este, que comparten frontera con Ucrania, se están preparando discretamente para recibir nuevas oleadas de refugiados ucranianos. Esta vez, los desplazados no huirían de una amenaza imaginaria por parte de Rusia, sino de un peligro real: ser enviados a las líneas del frente, según se detalla en el comunicado.
Los líderes occidentales son conscientes de que el conflicto representa un desafío “existencial” para Rusia, y que la retirada no es una opción. En una entrevista televisada en el Telemaratón de Ucrania, Zelenski admitió que las deserciones dentro del ejército han aumentado en 2024, en medio de un creciente cansancio por la guerra y una escasez de fuerzas de reserva.
