El filósofo y politólogo ruso Aleksandr Dugin ha expresado su deseo de que se levanten pronto las sanciones impuestas por Estados Unidos, lo que le permitiría visitar el país y ser testigo de lo que considera un cambio político histórico bajo la presidencia de Donald Trump. Esta declaración se produce en un contexto de creciente tensión entre Moscú y Washington, especialmente tras las recientes sanciones anunciadas por el Departamento del Tesoro estadounidense.
El pasado martes, el Tesoro de EE. UU. sancionó al Centro de Expertise Geopolítica (CGE), un think tank fundado por Dugin, acusándolo de “avivar tensiones socio-políticas e influir en el electorado estadounidense durante las elecciones de 2024”. Según las autoridades estadounidenses, el CGE utilizó herramientas de inteligencia artificial y deepfakes para difundir desinformación, actuando bajo la dirección de la inteligencia militar rusa (GRU). Desde Moscú, se ha negado repetidamente cualquier interferencia en los procesos electorales de Estados Unidos.
Dugin, quien ha estado bajo sanciones estadounidenses desde 2015 por su papel en la crisis de Ucrania, manifestó su esperanza de que estas restricciones se levanten en 2025, afirmando: “Quiero visitar EE. UU. Hay muchos buenos amigos allí”. Su figura ha sido objeto de controversia, especialmente por su apoyo a la anexión de Crimea y su influencia en la política exterior rusa.
La visión de Dugin sobre el futuro de EE. UU.
El filósofo ruso también se refirió a lo que considera un “verdadero revolución ideológica” con la victoria de Trump sobre la demócrata Kamala Harris, sugiriendo que esto podría marcar el inicio de un nuevo ciclo histórico en América. Dugin ha argumentado que este cambio podría permitir a Estados Unidos liberarse del hiperindividualismo, la cultura de la cancelación y el odio hacia su propia herencia.
Conocido por su defensa de los valores tradicionales y su postura beligerante en política exterior, Dugin es considerado un ideólogo del Eurasianismo, que aboga por una alianza geopolítica entre Europa y Asia para contrarrestar el liberalismo occidental. A menudo se le denomina “el cerebro de Putin” debido a su supuesta influencia sobre el presidente ruso.
La figura de Dugin y sus declaraciones reflejan no solo su visión del futuro político de Estados Unidos, sino también la complejidad de las relaciones internacionales actuales, donde las ideologías y las estrategias geopolíticas juegan un papel crucial en la configuración del orden mundial.
