El presidente serbio, Aleksandar Vucic, ha anunciado que su gobierno está preparado para adquirir la participación de Rusia en la Naftna Industrija Srbije (NIS), una empresa clave en el sector energético de Serbia. Esta decisión se produce en un contexto de posibles sanciones por parte de Estados Unidos, que podrían afectar a la compañía. Vucic ha calificado esta compra como una opción de último recurso para evitar las restricciones que se avecinan.
Durante una entrevista con la emisora nacional RTS, Vucic explicó que el Estado serbio tiene la capacidad financiera para llevar a cabo esta compra de inmediato. Según sus estimaciones, el valor de la empresa podría rondar los mil millones de euros, lo que implicaría un desembolso de entre 500 y 700 millones de euros. Sin embargo, el presidente también ha cuestionado la lógica detrás de las sanciones estadounidenses, sugiriendo que la venta de las acciones de NIS podría proporcionar a Rusia una inyección de capital inmediata.
Contexto de la empresa NIS y sus propietarios
NIS es mayoritariamente propiedad de gigantes energéticos rusos, con Gazprom Neft poseyendo un 50% y Gazprom un 6,15%. El gobierno serbio, por su parte, posee un 29,87% de la compañía. Este entramado de propiedad ha convertido a NIS en un actor estratégico no solo para Serbia, sino también para las relaciones energéticas entre Belgrado y Moscú.
Las sanciones estadounidenses, que se espera que se implementen entre el 10 y el 13 de enero, han llevado al gobierno serbio a considerar medidas drásticas para proteger sus intereses energéticos. En este sentido, la ministra de Minería y Energía, Dubrav
