La dureza del Dakar 2024: Un inicio inesperado y la pérdida de figuras clave
La 47ª edición del Dakar ha sorprendido a muchos pilotos por la extrema dureza del recorrido desde sus primeras etapas. Así lo ha manifestado el austríaco Tobías Ebster, quien, en un tono irónico, cuestiona las decisiones del director de la carrera, David Castera. En la jornada de descanso celebrada en Ha’il, Arabia Saudita, los competidores han expresado sus inquietudes sobre el nivel de exigencia que se ha impuesto en esta edición. Castera, ex piloto de motos y actual director del rally, asegura que la intención era crear un Dakar intenso, aprovechando la experiencia acumulada en los últimos años en territorio árabe. Las nuevas disposiciones, como la crono de 48 horas y la etapa maratón, han añadido un nivel adicional de dificultad, generando opiniones dispares entre los participantes.
Uno de los aspectos más destacados de este inicio de competición ha sido la pérdida de varias estrellas del rally. Laia Sanz, una de las figuras más emblemáticas, tuvo que abandonar tras un accidente en la primera etapa, poniendo fin a su racha de quince participaciones consecutivas. La FIA, al considerar que la seguridad de su vehículo no cumplía con los estándares pertinentes, impidió que pudiera continuar. Carlos Sainz y Sébastien Loeb, aunque continúan en carrera, también se han visto afectados por las estrictas normativas de seguridad, lo que ha generado un clima de frustración entre los competidores, quienes defienden la integridad de sus vehículos y su capacidad para competir de forma segura.
La situación también plantea interrogantes sobre la dirección que tomará el Dakar en los próximos años. La FIA, bajo el liderazgo de Mohammed Ben Sulayem, ha endurecido las normativas de seguridad desde su colaboración con ASO, lo que ha llevado a decisiones controvertidas en torno a la competición. Sainz, tras su descalificación, ha instado a la organización a reconsiderar estos criterios, sugiriendo que tal vez se deba encontrar un equilibrio más adecuado entre la seguridad y la naturaleza extrema de la competencia. A medida que los pilotos continúan enfrentándose a los desafíos del recorrido, las opiniones sobre la dureza del Dakar 2024 seguirán siendo objeto de debate, en un evento que, como recordaba Thierry Sabine, siempre ha estado marcado por el sufrimiento y la superación.