Blue Origin se prepara para el vuelo inaugural de su cohete New Glenn
Jeff Bezos ha dado un paso significativo en la carrera espacial con el lanzamiento del cohete New Glenn, diseñado por su empresa Blue Origin. Este potente cohete, que se encuentra en la plataforma de lanzamiento 36 de la Estación Espacial de la Fuerza Aérea de Cabo Cañaveral, está programado para despegar en un momento clave en el que busca competir directamente con SpaceX, la compañía dirigida por Elon Musk, y su exitoso modelo de cohetes Falcon. El New Glenn, con una altura de 98 metros, representa una inversión de una década y se perfila como una alternativa viable para el lanzamiento de sondas de la NASA, cargas de seguridad nacional y otros satélites comerciales.
El New Glenn está diseñado para ser un cohete reutilizable, similar a los cohetes Falcon de SpaceX. Su primera etapa, impulsada por siete motores BE-4 que utilizan metano, generará 3,8 millones de libras de empuje. Tres minutos y diez segundos después del lanzamiento, esta etapa se separará y realizará un intento de aterrizaje en un barco de recuperación personalizado que lleva el nombre de la madre de Bezos, Jacklyn. La misión, que se espera dure aproximadamente cinco horas y 50 minutos, incluirá el despliegue de un vehículo denominado Blue Ring, un «tug» espacial que puede alojar y desplegar múltiples satélites en diferentes órbitas.
El éxito del New Glenn podría significar un cambio en el panorama de los lanzamientos espaciales, donde SpaceX ha dominado el mercado desde el lanzamiento de su cohete Falcon 9 en 2010. Mientras que SpaceX ha realizado 134 lanzamientos el año pasado y ha recuperado exitosamente sus motores en 395 ocasiones, Blue Origin se enfrenta al desafío de demostrar la fiabilidad de su nuevo cohete. La capacidad del New Glenn para realizar vuelos tripulados en el futuro y su diseño optimizado para reducir los costos de acceso al espacio son aspectos que podrían hacerle ganar terreno en un sector cada vez más competitivo.