El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado su intención de establecer un nuevo organismo denominado «External Revenue Service» (Servicio de Ingresos Externos) para la recaudación de aranceles y derechos sobre importaciones extranjeras. Esta propuesta forma parte de su estrategia para aumentar los ingresos del gobierno a través de la imposición de tarifas a los productos importados, un enfoque que recuerda a las políticas fiscales de Estados Unidos antes de la introducción del impuesto sobre la renta en 1913.
Trump comunicó su plan a través de su plataforma Truth Social, donde afirmó: “Hoy anuncio que crearé el SERVICIO DE INGRESOS EXTERNOS para recaudar nuestros aranceles, derechos y todos los ingresos que provengan de fuentes extranjeras”. En su mensaje, subrayó que “comenzaremos a cobrar a aquellos que ganan dinero con nosotros a través del comercio, y finalmente comenzarán a pagar su parte justa”.
Un cambio en la política comercial estadounidense
El ex presidente presentó el «ERS» como una contraparte al Internal Revenue Service (IRS), la agencia tributaria de Estados Unidos, que fue establecida durante la Guerra Civil en 1862. Trump argumentó que los acuerdos comerciales actuales han beneficiado a la economía global a expensas de los intereses estadounidenses, afirmando que “a través de acuerdos comerciales débiles y patéticamente blandos, la economía estadounidense ha entregado crecimiento y prosperidad al mundo, mientras nos gravamos a nosotros mismos. Es hora de que eso cambie”.
Según Trump, la fecha de creación de esta nueva agencia sería el 20 de enero, coincidiendo con su toma de posesión para un segundo mandato. Aunque los presidentes de Estados Unidos pueden crear nuevas agencias mediante órdenes ejecutivas, se requiere un acto del Congreso para hacerlas permanentes y asegurar su financiación operativa.
Actualmente, la recaudación de aranceles y derechos aduaneros está a cargo de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, que opera bajo el Departamento de Seguridad Nacional. La propuesta de Trump ha generado un debate sobre la posibilidad de cambiar la carga del financiamiento del gobierno estadounidense de los impuestos a los aranceles, una idea que fue defendida por su asesor Steven Bannon en un reciente evento en Washington. Bannon afirmó que “los aranceles financiaron todo hasta principios del siglo XX” y sugirió que el nuevo organismo podría operar bajo el Tesoro, aliviando así la carga del IRS.