El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha exigido la preservación de «todos los registros» relacionados con la Oficina de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) del FBI, que ha sido cerrada recientemente. Esta decisión ha generado un intenso debate sobre la efectividad y la necesidad de tales iniciativas dentro de las agencias federales.
El FBI confirmó la clausura de su Oficina de Diversidad e Inclusión en una declaración emitida a Fox News. Aunque la agencia no especificó las razones exactas de este cierre, la medida se alinea con la promesa de campaña de Trump de reducir las iniciativas de DEI en las agencias federales una vez asuma la presidencia el próximo lunes.
En un mensaje publicado en Truth Social, Trump expresó: “Exigimos que el FBI preserve y retenga todos los registros, documentos e información sobre la ahora cerrada Oficina de DEI — Nunca debió haberse abierto y, si lo hizo, debió haberse cerrado hace mucho tiempo.” Además, cuestionó el cierre de la oficina justo un día antes de su investidura, sugiriendo que esto podría estar relacionado con la corrupción.
Críticas a las iniciativas de DEI
La decisión del FBI ha sido recibida con críticas por parte de legisladores republicanos, quienes argumentan que el enfoque en la diversidad ha comprometido la seguridad nacional. Este cierre se produce en un contexto de creciente debate nacional sobre el papel de los programas de DEI en el gobierno y el sector privado. Los críticos sostienen que tales iniciativas desvían la atención de las misiones fundamentales y reducen la efectividad operativa.
Durante su campaña, Trump prometió combatir lo que sus seguidores, incluido el magnate tecnológico Elon Musk, han denominado el “virus woke”. Desde su victoria electoral, varias corporaciones estadounidenses, como Meta, Amazon, McDonald’s, Ford y Walmart, han reducido o abandonado sus medidas de DEI.
Recientemente, la senadora Marsha Blackburn (R-Tenn.) expresó su preocupación por los esfuerzos de DEI del FBI en una carta dirigida al director saliente, Christopher Wray. Blackburn afirmó que priorizar la diversidad sobre la competencia podría poner en peligro la seguridad pública, argumentando que la atención del FBI en iniciativas de DEI ha puesto en riesgo la seguridad nacional y la vida de los estadounidenses.
Wray, quien fue nominado por Trump en 2017 tras el despido del entonces director James Comey, anunció en diciembre que dejaría su cargo. Se espera que el nuevo gobierno nomine a Kash Patel, un exfuncionario de seguridad nacional de la Casa Blanca, como su sucesor, sujeto a la confirmación del Senado.
