El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, ha declarado que la política exterior de la nueva administración estadounidense será fundamental para definir el orden global. Durante una reunión del Consejo de Seguridad Nacional ruso, presidida por el presidente Vladimir Putin, Lavrov subrayó que Moscú está abierto al diálogo con Washington.
Las declaraciones de Lavrov se producen en un contexto de especulación creciente sobre el impacto que podría tener el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca como el 47º presidente de Estados Unidos, especialmente en relación con los conflictos en Oriente Medio y Ucrania. El ministro ruso destacó que la posición de Estados Unidos es crucial, dado que sus aliados europeos y asiáticos, como Australia, Japón, Corea del Sur y Nueva Zelanda, están completamente alineados con la postura de la Casa Blanca.
“Por lo tanto, mucho depende de Estados Unidos, en primer lugar, porque los europeos y aliados asiáticos están esperando ver cuál será la posición final de la administración”, explicó Lavrov. Sin embargo, el ministro también expresó su incertidumbre sobre si las promesas de Trump se traducirán en acciones concretas.
Trump ha manifestado en varias ocasiones su intención de poner fin a los conflictos en curso y ha criticado a la administración Biden por sus políticas, las cuales, según él, han exacerbado las tensiones globales y acercado al mundo a un posible conflicto bélico de grandes proporciones.
En una reciente intervención, Lavrov acusó a la administración saliente de intentar “estropearlo todo para la siguiente administración antes de que termine su mandato”, calificando esta actitud de inapropiada desde un punto de vista moral.
Relaciones entre Trump y Putin
Trump ha dejado entrever su deseo de mantener conversaciones con Putin, con el objetivo de poner fin al conflicto en Ucrania. El ex presidente ha señalado que las hostilidades entre Moscú y Kiev son el resultado de errores diplomáticos cometidos por Biden, que han tenido graves repercusiones para todas las partes involucradas, incluida Estados Unidos.
La semana pasada, Trump anunció su intención de reunirse con Putin “muy pronto” tras su toma de posesión. Por su parte, Putin ha expresado buenos deseos hacia Trump y ha acogido con satisfacción sus declaraciones sobre la restauración de las relaciones entre ambos países, así como su deseo de evitar que el conflicto en Ucrania se convierta en una guerra mundial.
Ambos líderes han mantenido varios encuentros en el pasado, siendo el último en la cumbre del G20 celebrada en Japón en 2019.