Reacciones a la investigación sobre Íñigo Errejón por presunta agresión sexual
La reciente investigación sobre la presunta agresión sexual de Íñigo Errejón, ex portavoz de Sumar, ha suscitado una fuerte reacción por parte de la formación política. Aina Vidal, portavoz adjunta de Sumar y diputada de los Comunes, ha criticado de manera contundente el interrogatorio realizado por el juez a la actriz Elisa Mouliaá, a quien se acusa de haber sido víctima de una agresión. Vidal ha calificado el interrogatorio como una «revictimización» y ha señalado que las actitudes del magistrado no solo son inaceptables, sino que también pueden desincentivar a otras mujeres a denunciar situaciones similares. En declaraciones a la prensa, ha instado al juez a disculparse y a reflexionar sobre la necesidad de que la Justicia sea un espacio seguro para todas las mujeres.
Por su parte, Javier Sánchez Serna, portavoz de Podemos en el Congreso, ha respaldado las críticas a la actuación del juez y ha destacado la importancia de una adecuada formación en género para el personal judicial. Según él, el vídeo del interrogatorio es «suficientemente elocuente» para evidenciar la necesidad de que muchos jueces comprendan mejor la sensibilidad en casos de agresión sexual. Esta situación plantea un debate más amplio sobre cómo se manejan las denuncias por agresiones sexuales en el sistema judicial español y la necesidad de garantizar un trato respetuoso y apropiado a las víctimas.
En el centro de la controversia se encuentra la declaración de Íñigo Errejón, quien ha expuesto su versión de los hechos, negando las acusaciones y defendiendo que las interacciones con Mouliaá fueron consensuadas. Errejón ha afirmado que la relación se desarrolló en un contexto de tonteo y que en ningún momento se produjo una agresión. Sin embargo, la discusión sobre la forma en que se aborda este tipo de casos en los tribunales continúa siendo un tema de gran relevancia en la sociedad española, especialmente en un momento en el que se busca fomentar un entorno en el que las mujeres se sientan empoderadas para denunciar cualquier forma de violencia o acoso.