La seguridad en las redes sociales para adolescentes: un nuevo enfoque de Meta
Las redes sociales se han convertido en el principal espacio virtual para los adolescentes, donde interactúan con sus amigos y descubren sus intereses. Sin embargo, esta realidad también ha generado inquietudes en los padres sobre la seguridad de sus hijos en estos entornos digitales. Conscientes de estas preocupaciones, Meta, la compañía detrás de plataformas como Instagram, ha lanzado las Cuentas de Adolescente, que están siendo implementadas progresivamente en Europa desde principios de 2025. Estas cuentas incorporan protecciones integradas que limitan el contacto de los jóvenes con desconocidos y regulan el contenido al que pueden acceder, brindando así un entorno más seguro para su uso.
Las Cuentas de Adolescente se configuran como privadas por defecto, lo que significa que solo los seguidores aprobados pueden ver el contenido publicado por los jóvenes. Además, la compañía ha implementado restricciones en la mensajería, permitiendo que los adolescentes solo reciban mensajes de aquellos a quienes siguen o de personas previamente conocidas. Otra de las características destacadas es la posibilidad de establecer límites de tiempo de uso diario, lo que garantiza que los adolescentes no pasen más tiempo del recomendado en la aplicación. Asimismo, los padres tienen la capacidad de bloquear el acceso a Instagram durante períodos específicos, como durante las horas de sueño o en momentos de estudio.
Meta también ha tomado medidas para abordar el problema de la veracidad en la edad de los usuarios. La compañía está desarrollando nuevas tecnologías para verificar la edad de los usuarios y detectar perfiles de adolescentes que puedan estar configurados incorrectamente como mayores de 18 años. Además, se han implementado normas más estrictas en cuanto al contenido, eliminando aquellos que puedan ser perjudiciales, como materiales de carácter sexual o que aborden temas de suicidio o autolesiones. Con estas iniciativas, Meta busca ofrecer a los padres la tranquilidad de que sus hijos pueden disfrutar de las redes sociales de manera segura, fomentando así una experiencia digital más positiva y controlada.
