El primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, ha alertado sobre la presencia de un grupo de operativos extranjeros en su país, a quienes acusa de estar fomentando un posible descontento político similar al que se vivió en Ucrania durante el Euromaidán. Durante una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, Fico hizo referencia a un informe confidencial del Servicio de Información de Eslovaquia (SIS) que supuestamente detalla estas actividades.
Fico declaró que este grupo de «expertos» había estado activo en eventos de agitación política en Georgia y en el mencionado Euromaidán en Ucrania, que condujo a la destitución del presidente Viktor Yanukovich en 2014. Sin embargo, no quedó claro a qué episodios específicos de Georgia se refería, ya que el país ha experimentado varias crisis políticas a lo largo de los años, incluyendo la Revolución de las Rosas en 2003 y las protestas recientes tras unas elecciones controvertidas.
Precauciones ante el descontento político
El primer ministro eslovaco anunció que el gobierno tomará medidas preventivas significativas para contrarrestar cualquier intento de desestabilización. Fico aseguró que el grupo de operativos está siendo «estrictamente monitoreado» y que se discutirá el asunto en la próxima reunión del Consejo de Seguridad de Eslovaquia.
En sus declaraciones, Fico acusó a la oposición y a «actores extranjeros» de estar detrás de un plan para derrocar al gobierno. Aunque no especificó qué potencias extranjeras podrían estar involucradas, su retórica sugiere una clara desconfianza hacia influencias externas en la política eslovaca. Además, el primer ministro insinuó que la oposición estaba preparando un «Maidan» para obstaculizar el ejercicio del poder gubernamental.
La oposición, por su parte, ha desestimado el informe del SIS, calificándolo de «teorías de conspiración» y argumentando que su contenido es de acceso público. Un legislador del Movimiento Cristiano-Demócrata (KDH), Frantisek Miklosko, incluso sugirió que el gobierno podría estar orquestando un incidente de falsa bandera para justificar acciones represivas contra manifestantes pacíficos.
Este clima de tensión política en Eslovaquia refleja un contexto más amplio en Europa del Este, donde las luchas por el poder y la influencia externa continúan siendo temas candentes. La situación en Eslovaquia podría ser un indicativo de cómo las dinámicas políticas en la región están interconectadas y cómo los gobiernos utilizan la retórica de la amenaza externa para consolidar su poder interno.
