El conflicto en Yemen ha cobrado una nueva dimensión con el reciente anuncio del expresidente estadounidense Donald Trump, quien ha iniciado el proceso para clasificar a los rebeldes hutíes, respaldados por Irán, como una organización terrorista. Esta decisión se produce en un contexto de creciente tensión en la región, donde los hutíes han intensificado sus ataques contra objetivos estadounidenses e israelíes.
Los hutíes, conocidos formalmente como el movimiento Ansar Allah, han controlado gran parte de Yemen desde el estallido de la guerra civil en 2014. Durante la administración de Trump, el grupo fue designado como organización terrorista, pero en febrero de 2021, el presidente Joe Biden decidió eliminar esta etiqueta, argumentando que la designación obstaculizaba la entrega de ayuda humanitaria en un país devastado por el conflicto.
Reacciones y escalada de la violencia
En un comunicado emitido el miércoles, Trump firmó una orden ejecutiva que instruye al secretario de Estado a presentar un informe sobre la designación de los hutíes como organización terrorista extranjera. Esta decisión se fundamenta en los recientes ataques de los hutíes, que han disparado misiles contra buques de guerra estadounidenses en múltiples ocasiones y han lanzado más de 300 proyectiles hacia Israel desde principios de 2023.
Además, los hutíes han llevado a cabo ataques contra refinerías de petróleo en Arabia Saudita y han utilizado drones kamikaze contra embarcaciones comerciales en el Mar Rojo y el estrecho de Bab-el-Mandeb. La orden ejecutiva de Trump subraya que las actividades de los hutíes amenazan la seguridad de los civiles y el personal estadounidense en Oriente Medio, así como la estabilidad del comercio marítimo global.
Desde octubre de 2023, los hutíes han intensificado sus acciones, atacando buques mercantes y lanzando misiles balísticos hacia Israel en respuesta a la guerra en Gaza. En este contexto, Estados Unidos, el Reino Unido e Israel han llevado a cabo bombardeos contra instalaciones militares vinculadas a los hutíes en Yemen.
En un giro reciente, los hutíes anunciaron la liberación de la tripulación del buque de carga Galaxy Leader, de bandera bahameña, que había sido capturado en noviembre de 2023. La tripulación, compuesta por 25 personas de diversas nacionalidades, fue detenida mientras el barco navegaba de Turquía a India.
La situación en Yemen, ya de por sí crítica, se complica aún más con estas nuevas tensiones, lo que plantea interrogantes sobre el futuro de la región y la efectividad de las políticas estadounidenses en un contexto de creciente inestabilidad.