La cadena estadounidense de grandes superficies Target ha decidido dar un paso atrás en sus programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) tras un periodo de creciente presión por parte de grupos conservadores. En un comunicado interno, la empresa con sede en Minneapolis anunció la finalización de sus objetivos DEI establecidos hace tres años y la suspensión de informes dirigidos a grupos externos centrados en la diversidad, como el Índice de Igualdad Corporativa de la Human Rights Campaign. Además, se ha decidido cesar un programa que promovía la comercialización de productos de empresas propiedad de minorías.
Kiera Fernandez, directora de impacto comunitario y equidad de Target, destacó en el memo que esta decisión se basa en «años de datos, percepciones y aprendizajes» que han moldeado la nueva estrategia de la empresa. Aseguró que, como minorista que atiende a millones de consumidores diariamente, es crucial adaptarse al paisaje externo en constante evolución para impulsar el crecimiento de Target.
Contexto de la Decisión
Este movimiento sitúa a Target en la misma línea que otras importantes corporaciones como Walmart, Meta y McDonald’s, que también han optado por desmantelar compromisos relacionados con la DEI. Estas decisiones han sido influenciadas, en parte, por la presión de activistas conservadores y por la reciente decisión de la Corte Suprema de EE.UU. que bloqueó la acción afirmativa en las universidades, lo que ha llevado a muchas empresas a replantearse sus políticas de inclusión.
La decisión de Target se produce en un contexto donde la retórica conservadora ha cobrado fuerza, especialmente desde la administración de Donald Trump, quien firmó órdenes ejecutivas para poner fin a programas de DEI en el gobierno federal. Esta tendencia refleja un cambio en el enfoque de las corporaciones hacia la diversidad, que en años anteriores había cobrado impulso tras el movimiento Black Lives Matter y la tragedia de George Floyd en 2020, que motivó a muchos líderes corporativos a comprometerse a aumentar la representación de las minorías en sus plantillas.
A pesar de la eliminación de los objetivos DEI, Target ha informado que no habrá recortes de empleo asociados a esta reestructuración y que continuará con la celebración de meses de herencia cultural, aunque ha enfrentado desafíos en el camino. La compañía tuvo que retirar productos de su colección del Mes del Orgullo tras recibir amenazas contra sus empleados por ciertos artículos que consideraban controversiales.
El panorama actual para las grandes corporaciones en EE.UU. refleja una polarización en torno a las políticas de diversidad e inclusión, lo que ha llevado a la creación de un entorno difícil donde las decisiones comerciales se ven influenciadas por factores externos, incluidos los movimientos sociales y la presión política. En este contexto, es importante observar cómo evoluciona la estrategia de Target y cómo otras empresas responderán a la creciente demanda de sus consumidores por una representación más equitativa en el mercado.