El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha delineado sus prioridades tanto en el ámbito exterior como en el interior durante su intervención por teleconferencia en el Foro Económico Mundial de Davos, apenas días después de asumir el cargo. En su discurso, prometió una “revolución del sentido común” y afirmó que estaba actuando “con una velocidad sin precedentes” para revertir las políticas de su predecesor, Joe Biden.
Control de la inflación
Trump comenzó su intervención prometiendo enfrentar el “caos económico” causado por las “políticas fallidas” de Biden. Afirmó que durante los últimos cuatro años, el gobierno acumuló $8 billones en gastos deficitarios derrochadores y aplicó restricciones energéticas y regulaciones que, según él, han perjudicado gravemente al país.
El presidente indicó que ha instruido a su gabinete a “movilizar todos los poderes a su disposición” para derrotar la inflación y reducir el costo de vida. Además, prometió aprobar “la mayor reducción de impuestos en la historia de Estados Unidos”, que incluiría alivios significativos para trabajadores y familias, así como para productores y fabricantes nacionales.
Resolución del conflicto en Ucrania y relación con Rusia
Trump mencionó que se están llevando a cabo esfuerzos para asegurar un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania, afirmando que Kiev está “listo para llegar a un acuerdo”. Describió el conflicto en Ucrania como “un campo de muerte absoluto” y declaró que “es hora de ponerle fin”.
El presidente estadounidense reiteró su disposición a reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin, “pronto” para discutir la situación. Además, señaló a China como un país que podría ayudar a poner fin al conflicto, sugiriendo que “tienen un gran poder sobre esa situación”.
Reducción de armas nucleares
Trump también anunció que mantendrá conversaciones con China y Rusia sobre la reducción de los arsenales nucleares. “Queremos ver si podemos desnuclarizar, y creo que eso es muy posible,” afirmó, añadiendo que sería “algo increíble para el planeta”.
Impuestos bajos o altos aranceles
El presidente lanzó una advertencia a las empresas de todo el mundo: o fabrican sus productos en Estados Unidos o enfrentarán aranceles. “Mi mensaje a cada empresa en el mundo es muy simple. Vengan a fabricar su producto en América, y les ofreceremos algunos de los impuestos más bajos de cualquier nación en la Tierra,” dijo. Si las empresas optan por no fabricar en Estados Unidos, “entonces, muy simplemente, tendrán que pagar un arancel,” añadió.
Emergencia energética y seguridad fronteriza
Trump declaró una “emergencia energética nacional” para “desbloquear el oro líquido” del petróleo bajo el suelo estadounidense. Criticó el Green New Deal y la salida de Estados Unidos del Acuerdo de París, considerándolos pasos necesarios para alcanzar sus objetivos.
En cuanto a la seguridad fronteriza, Trump celebró su orden ejecutiva declarando una “emergencia nacional en la frontera”, destinada a contrarrestar la inmigración ilegal. Informó que tropas activas de la Guardia Nacional ya están desplegadas en la frontera, “repeliendo la invasión”.
Libertad de expresión y género
El presidente afirmó que “ya no permitiremos que nuestro gobierno etiquete el discurso de nuestros propios ciudadanos como desinformación”, destacando que su orden ejecutiva sobre la censura “salvó la libertad de expresión en América”. También criticó las políticas de diversidad y equidad, reafirmando que la política oficial de EE. UU. es que “solo hay dos géneros, masculino y femenino”.
Trump concluyó su discurso afirmando que “no permitiremos que hombres participen en deportes femeninos, y las operaciones de cambio de género, que se han vuelto populares, ocurrirán muy raramente”.
