Una ola de manifestaciones ha recorrido Alemania en respuesta al ascenso del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD), que se prepara para las elecciones parlamentarias programadas para el próximo mes. Miles de manifestantes han salido a las calles para expresar su rechazo a las políticas antiinmigración del AfD, que actualmente se sitúa en torno al 20% de apoyo en las encuestas.
Las protestas se llevaron a cabo el pasado sábado en varias ciudades, incluyendo Berlín y Colonia, donde las autoridades estimaron la participación en 35,000 y 40,000 personas, respectivamente. En Berlín, una multitud se reunió frente a la emblemática Puerta de Brandeburgo, coreando lemas y portando pancartas que denunciaban al AfD y proclamaban que “Ningún ser humano es ilegal”.
Estas manifestaciones se producen tras el lanzamiento oficial de la campaña electoral del AfD en Halle, donde el evento atrajo a aproximadamente 4,500 asistentes. La conferencia ganó notoriedad mediática después de que Elon Musk, propietario de X y aliado cercano del expresidente estadounidense Donald Trump, se dirigiera a los asistentes por videoconferencia, expresando su “pleno apoyo” al AfD y llamando a “preservar la cultura alemana” y “proteger al pueblo alemán”. Musk ha enfrentado críticas por su aparente intromisión en los asuntos internos de Alemania.
Contexto político y social
Las elecciones parlamentarias fueron convocadas para el 23 de febrero tras el colapso de la coalición gubernamental del canciller Olaf Scholz, que se produjo debido a desacuerdos sobre reformas económicas, políticas climáticas y ayuda a Ucrania. Actualmente, el AfD es el segundo partido más popular en Alemania, con un 21% de apoyo, según el Instituto para Nuevas Respuestas Sociales (INSA). En comparación, la Unión Demócrata Cristiana (CDU) lidera con un 30%, mientras que los Socialdemócratas (SPD) de Scholz se sitúan en un 16%.
Recientemente, la CDU ha manifestado su disposición a implementar medidas más severas contra la inmigración, “si el AfD apoya nuestras propuestas”, lo que contrasta con las políticas de la CDU en la década de 2010, cuando se acogieron a cientos de miles de solicitantes de asilo. Este aparente cambio de rumbo se ha visto impulsado por numerosos informes sobre delitos violentos cometidos por migrantes. En un incidente reciente, las autoridades alemanas arrestaron a un hombre de 28 años de Afganistán tras un ataque con cuchillo en un parque de Aschaffenburg, que resultó en la muerte de dos personas, incluyendo a un niño de dos años.