El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado una orden ejecutiva que excluye a las personas con disforia de género del servicio militar. Esta medida, titulada ‘Priorizando la Excelencia y Preparación Militar’, fue emitida el pasado lunes, poco más de una semana después de su toma de posesión, y forma parte de un esfuerzo más amplio por desmantelar los programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) en el gobierno federal.
La orden establece que el servicio militar debe reservarse para aquellos que sean mental y físicamente aptos para el deber. Se enfoca en la preparación de las tropas, la letalidad, la cohesión, la honestidad, la humildad, la uniformidad y la integridad. En este sentido, la política rechaza la inclusión de personas cuya identidad de género no se alinee con su sexo biológico, argumentando que esto es inconsistente con las limitaciones médicas, quirúrgicas y de salud mental de los individuos con disforia de género.
Implementación de la nueva política
El nuevo Secretario de Defensa, Pete Hegseth, quien fue confirmado por el Senado el pasado viernes, tiene la responsabilidad de implementar esta directiva. En un plazo de 60 días, Hegseth deberá revisar los estándares médicos para el servicio militar de acuerdo con los objetivos de la orden. Durante el próximo mes, establecerá una estrategia para abordar estos temas y la presentará a Trump.
Hegseth ha declarado que el enfoque del ejército se centrará en “restaurar el ethos guerrero, reconstruir nuestras fuerzas armadas y restablecer la disuasión”. Esta orden ejecutiva se suma a una serie de acciones del nuevo presidente estadounidense destinadas a desmantelar los programas DEI dentro del gobierno federal. En su primer día de mandato, Trump firmó órdenes que revocan las protecciones para las personas transgénero y terminan con las iniciativas DEI, describiendo estos esfuerzos como intentos de poner fin a la “ingeniería social de la raza y el género en todos los aspectos de la vida pública y privada”.