En el marco de la temporada cultural que une a Francia y Brasil, el grupo musical AYOM se prepara para ofrecer un concierto emblemático en el festival Au Fil de Voix en París, el próximo 31 de enero. Este evento no solo celebra la rica conexión cultural entre ambas naciones, sino que también coincide con el 50 aniversario de la independencia de varios países africanos de habla portuguesa. La banda, compuesta por miembros de Brasil, Italia, Grecia y Angola, ha emergido como un símbolo de la cooperación internacional a través de la música, fusionando tradiciones de distintas partes del mundo.
Alberto Becucci, miembro fundador de AYOM, explica que, a pesar de los horrores de la colonización, la música ha logrado transformar lo negativo en algo positivo. El grupo busca rescatar y reinterpretar tradiciones musicales que han sido moldeadas por la historia compartida entre África, Europa y América del Sur. Este esfuerzo se enmarca dentro de una asociación estratégica renovada entre Francia y Brasil, que se remonta a 2006, y cuyo objetivo es profundizar los lazos culturales entre ambas naciones.
La música de AYOM se caracteriza por su diversidad sonora, que incluye influencias africanas, brasileñas y europeas. La banda ha lanzado recientemente un nuevo sencillo titulado ‘Samba Para O Vazio’, que presenta letras en portugués y francés, reflejando la intención de conectar con audiencias de diferentes culturas. Jabu Morales, líder del grupo, aporta su vasto conocimiento sobre la música brasileña, mientras que Timoteo Grignani, con sus raíces griegas e italianas, introduce un enfoque europeo a la mezcla. Para ellos, el groove es fundamental, y es precisamente en la música africana donde encuentran las claves para crear ritmos que resuenen con el público.
La fusión de ritmos y tradiciones es un tema recurrente en la obra de AYOM. Grignani menciona cómo la música angoleña tiene vínculos históricos con la música cubana, y cómo el semba angoleño ha influido en el samba brasileño. Esta interconexión de culturas se ve reflejada también en el nombre de la banda, que significa «Señor de la Música» en Candomblè, una religión afrobrasileña que amalgama diversas tradiciones africanas con el catolicismo. AYOM se presenta así no solo como un grupo musical, sino como un vehículo de expresión cultural que busca trascender barreras lingüísticas y conectarse con la esencia de la humanidad.
Su próximo álbum, titulado ‘Sa.Li.Va.’, explora tres conceptos fundamentales en su música: sacralidad, libertad y valentía. A lo largo de sus nueve pistas, AYOM aborda estas temáticas de manera que invitan a la reflexión sobre la espiritualidad y la conexión con lo trascendental. Becucci señala que, aunque las canciones estén inspiradas en deidades y tradiciones africanas, su enfoque es más amplio, abogando por una interpretación de la música como una manifestación de algo mayor que trasciende lo físico.
Con actuaciones en más de 15 países el año pasado, AYOM continúa desafiando las barreras culturales mediante su música. La banda ha logrado crear un lenguaje universal que comunica emociones, más allá de las palabras. Becucci destaca la capacidad de la música para conectar a las personas a un nivel más profundo, donde los sentimientos son más importantes que el significado literal de las letras. Este enfoque resuena con el título de su álbum, recordando que, a pesar de las diferencias lingüísticas, todos compartimos la misma esencia humana.
