La temporada de premios de 2025, que incluye los Grammy, se celebró en un contexto marcado por los devastadores incendios forestales que afectaron a partes de Los Ángeles en enero. A pesar de las dudas iniciales sobre la celebración del evento, la ceremonia tuvo lugar el pasado domingo, demostrando que la música y el arte pueden prevalecer incluso en tiempos difíciles.
La 67ª edición de los premios Grammy estuvo marcada por los incendios, comenzando con una emotiva interpretación de «I Love L.A.» de Randy Newman. Lady Gaga y Bruno Mars también rindieron homenaje a la ciudad con su actuación de “California Dreamin’” de The Mamas & the Papas. Durante la gala, muchos artistas llevaron insignias en forma de corazón azul para apoyar los esfuerzos de ayuda de MusicCares. Al final de la noche, el presentador Trevor Noah anunció que los espectadores habían donado un total de 7 millones de dólares a los esfuerzos de socorro por los incendios.
Durante la transmisión de casi cuatro horas desde el Crypto.com Arena en Los Ángeles, las actuaciones destacadas no faltaron. Chappell Roan ofreció un colorido espectáculo junto a vaqueros maquillados de payasos en su interpretación de “Pink Pony Club”. Benson Boone realizó su tema “Beautiful Things” y sorprendió al público con un par de acrobacias en el escenario. Por su parte, Doechii presentó una actuación impactante que combinó sus canciones “Catfish” y “Denial is a River”, acompañada por bailarines que complementaban su energía.
Los premios más importantes de la noche también cumplieron con las expectativas. Chappell Roan fue galardonada como Mejor Artista Nuevo; Kendrick Lamar se llevó a casa tanto la Canción del Año como el Disco del Año por su éxito “Not Like Us”. Además, Beyoncé logró finalmente el Grammy al Álbum del Año por «Cowboy Carter.»
La gala, a pesar de los desafíos, se consolidó como un evento significativo, tanto por su capacidad de reunir a la comunidad musical como por su compromiso con la solidaridad en tiempos de crisis.
