La superconductividad es un fenómeno en el que ciertos materiales pueden conducir electricidad sin pérdida de energía, lo que les confiere aplicaciones potenciales en tecnologías avanzadas, desde trenes de levitación magnética hasta ordenadores cuánticos. Sin embargo, este comportamiento extraordinario a menudo se manifiesta sólo a temperaturas extremadamente bajas, lo que limita su uso generalizado en la industria y la investigación.
Entre los materiales superconductores, el estroncio rutenato (Sr2RuO4) se ha convertido en un enigma para los científicos desde su descubrimiento en 1994. Inicialmente, se pensó que este material poseía un estado de superconductividad denominado «spin-triplet», conocido por su supercorriente de espín. Sin embargo, la comprensión completa de su comportamiento ha eludido a los investigadores durante casi tres décadas.
Controversias en la investigación del estroncio rutenato
Recientes investigaciones han sugerido que el estroncio rutenato podría comportarse más como un estado de «spin-singlet», donde los pares de electrones no tienen espín. Además, las variaciones en las propiedades del material bajo presión indican un tipo de comportamiento único. A pesar de estos hallazgos, una explicación integral del fenómeno sigue siendo esquiva, y se requieren pasos de investigación adicionales para desentrañar los secretos de la superconductividad en este material.
Un artículo de perspectiva publicado en Nature Physics por un equipo de la Universidad de Kioto resalta las controversias actuales, particularmente las discrepancias observadas en experimentos utilizando presión uniaxial y ultrasonido, un punto que promete sorprender a muchos dentro de la comunidad investigadora. Giordano Mattoni, uno de los colaboradores del estudio, advierte sobre la necesidad urgente de replantear las ideas tradicionales sobre la superconductividad. “Nuevas formas de emparejamiento exótico de electrones podrían estar ocultas en el estado superconductor del estroncio rutenato, como el novedoso estado de spin-triplet interorbital que se comporta como un estado de spin-singlet”, señala Mattoni.
La comprensión de estos misterios no solo contribuiría al conocimiento sobre la superconductividad, sino que también podría facilitar la búsqueda de nuevos materiales que sean aplicables en futuras tecnologías avanzadas. La exploración de la superconductividad en el estroncio rutenato sigue siendo un terreno fértil para la investigación y la innovación, con el potencial de transformar el uso de la electricidad en nuestra sociedad.
