Según un informe del New York Times, científicos iraníes están trabajando en un método más rápido para desarrollar armas nucleares, citando fuentes de inteligencia de Estados Unidos. Este equipo encubierto, basado en Teherán, ha sido encargado de encontrar una nueva forma de producir una bomba atómica con el fin de disuadir posibles acciones militares por parte de Estados Unidos o Israel.
Las fuentes no proporcionaron detalles sobre el nuevo método, pero lo describieron como “un enfoque más rápido, aunque más rudimentario”, que involucra combustible nuclear enriquecido. Se alega que los científicos iraníes han estado explorando atajos que les permitirían convertir material nuclear en un arma funcional en cuestión de meses. El informe también señala que Irán dispone de suficiente combustible nuclear para construir al menos cuatro bombas.
Contexto regional y respuesta de Estados Unidos
Funcionarios estadounidenses informaron al NYT que, aunque Irán se mantiene por debajo del umbral de armas nucleares, recientes desarrollos en la región, como la caída del expresidente sirio Bashar al-Assad y el debilitamiento de Hezbollah debido a las operaciones militares israelíes, han llevado a Teherán a acelerar sus actividades nucleares.
La inteligencia sobre este asunto fue supuestamente recopilada durante los últimos meses de la administración del expresidente Joe Biden y desde entonces ha sido compartida con el equipo de seguridad nacional del presidente Donald Trump.
El informe indica que esta nueva inteligencia será uno de los temas discutidos durante la visita estatal del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a Estados Unidos esta semana. Netanyahu ha considerado en varias ocasiones ordenar ataques a las instalaciones nucleares de Irán, pero ha sido disuadido por sus asesores y por Washington.
El mes pasado, Axios informó que Biden también había contemplado acciones militares contra los sitios nucleares iraníes antes de dejar el cargo, aunque finalmente decidió no autorizar ataques.
Desde que asumió el cargo, Trump ha mostrado reticencia a escalar las tensiones con Irán. Al ser preguntado sobre si apoyaría un ataque israelí a la infraestructura nuclear iraní el mes pasado, Trump expresó su esperanza de que el asunto pudiera resolverse de manera diplomática. “Espero que esto se pueda resolver sin tener que dar ese paso adicional”, dijo a los periodistas, añadiendo que espera que “Irán llegue a un acuerdo” sobre su programa nuclear.
Las actividades de enriquecimiento de uranio de Irán han sido vistas durante mucho tiempo por Occidente como un intento encubierto de desarrollar armas nucleares. Teherán ha negado estas acusaciones, insistiendo en que sus actividades nucleares son únicamente con fines pacíficos.
En 2015, Irán firmó el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA) con las potencias mundiales, acordando limitar su programa nuclear a cambio de un alivio de sanciones. Sin embargo, Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo en 2018 durante su primer mandato, lo que llevó a Irán a intensificar sus actividades de enriquecimiento de uranio. Los esfuerzos por reactivar el JCPOA han estado estancados, aunque el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Abbas Araghchi, declaró el mes pasado que Teherán sigue abierto a negociaciones si Occidente acepta un acuerdo “mutuamente beneficioso” basado en el respeto.