Un reciente estudio realizado por investigadores de la Stanford Doerr School of Sustainability ha revelado el impacto significativo que las emisiones de las plantas de energía de carbón tienen sobre la agricultura en India, afectando especialmente los cultivos de trigo y arroz. Este fenómeno, que resulta en pérdidas de rendimiento de hasta el 10% o más, plantea serias implicaciones para la seguridad alimentaria en el segundo país más poblado del mundo, donde un cuarto de la población sufre de desnutrición.
Emisiones de carbón y su efecto en la producción agrícola
El estudio, publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, busca entender la relación entre el crecimiento de la demanda de electricidad en India, que se satisface en más del 70% mediante generación a partir de carbón, y la necesidad de mantener la seguridad alimentaria. Según Kirat Singh, autor principal del estudio, es fundamental considerar los compromisos que se generan entre estas dos necesidades.
A pesar de investigaciones previas que estimaban los costos ocultos de la quema de carbón, especialmente en términos de mortalidad vinculada a la contaminación, hasta ahora no se habían cuantificado las pérdidas específicas en la producción agrícola atribuibles a estas emisiones. El estudio destaca que los contaminantes del aire, como el ozono y el dióxido de nitrógeno (NO2), afectan negativamente los rendimientos de los cultivos.
Los autores del estudio utilizaron un modelo estadístico que combina registros diarios de dirección del viento y generación eléctrica en 144 plantas de energía en India, junto con mediciones satelitales de NO2. Los hallazgos indican que las emisiones de las plantas de carbón afectan las concentraciones de NO2 en las áreas agrícolas hasta 100 kilómetros a la redonda, lo que sugiere que eliminar estas emisiones durante las temporadas clave de cultivo podría incrementar el valor de la producción de arroz y trigo en aproximadamente $420 millones y $400 millones al año, respectivamente.
El estudio también revela que, aunque el valor de la producción perdida es generalmente menor que el daño mortal que causa cada planta de energía de carbón, el daño a los cultivos por gigavatio-hora de electricidad generada puede ser mayor en muchos casos. En 58 de las 144 plantas analizadas, el daño al arroz por gigavatio-hora superó al daño mortal, mientras que para el trigo esta cifra fue mayor en 35 plantas.
Estos resultados subrayan la importancia de abordar las cuestiones ambientales desde una perspectiva sistémica. Inês Azevedo, coautora del estudio, enfatiza que cualquier política destinada a reducir las emisiones de las plantas de carbón en India debe considerar los daños causados por la contaminación del aire a la agricultura, ya que las políticas que no abordan este aspecto crucial podrían ser ineficaces.
En regiones con alta generación eléctrica a partir de carbón, como Chhattisgarh, las emisiones de carbón representan entre el 13% y el 19% de la contaminación por NO2, dependiendo de la temporada. En contraste, en estados como Uttar Pradesh, esta cifra se reduce al 3-5%. La contaminación por NO2 no solo proviene de las plantas de energía, sino también de otras fuentes, como el tráfico y la industria.
La investigación concluye que políticas bien dirigidas para reducir las emisiones podrían generar un incremento significativo en la producción agrícola, al mismo tiempo que se mitigan los efectos del cambio climático y se mejoran las condiciones de salud pública. En un contexto donde la seguridad alimentaria es esencial, las implicaciones de este estudio son de vital importancia para la formulación de políticas en India y más allá.