Las autoridades rusas han informado que las condiciones meteorológicas adversas están obstaculizando las operaciones de rescate de un buque de carga chino que se ha encallado frente a la isla de Sajalín, en el Lejano Oriente ruso. El barco, conocido como An Yang 2, se encuentra completamente cargado de carbón y fuelóleo, lo que ha llevado a las autoridades locales a declarar una alerta máxima debido a los riesgos ambientales que podría conllevar la situación.
Según el Ministerio de Emergencias de Rusia, el incidente se produjo la noche del 9 de febrero, cuando el Centro de Gestión de Crisis recibió información sobre el encallamiento del buque, ubicado a unos 200 metros de la costa, al sur del puerto de Nevelsk. A bordo del An Yang 2 hay 20 tripulantes, todos ellos ciudadanos chinos, quienes no requieren asistencia médica. Hasta el momento, no se ha observado ningún derrame de combustible.
Estado de alerta y medidas preventivas
El gobernador de Sajalín, Valery Limarenko, ha indicado que el buque quedó atrapado mientras cargaba carbón en el puerto, debido a una tormenta que provocó la pérdida de control de la embarcación. A pesar de que no hay una amenaza inmediata para la tripulación, las autoridades permanecen en estado de alerta debido a la naturaleza peligrosa de la carga y las condiciones climáticas adversas.
Limarenko ha declarado un estado de preparación elevada en el distrito de Nevelsk, subrayando la necesidad de una respuesta rápida. El buque se encuentra en aguas poco profundas, a una profundidad de aproximadamente 2,7 metros, lo que complica aún más las operaciones de rescate. Las fuertes ráfagas de viento y las altas olas han impedido que los equipos de rescate y los buzos se acerquen a la embarcación.
Las autoridades han planeado desplegar barreras de contención como medida preventiva ante posibles fugas de combustible. A pesar de las dificultades, se espera que las decisiones sobre la descarga del buque o su remoción de la zona se tomen tan pronto como las condiciones meteorológicas mejoren.
La comunicación con la tripulación ha sido complicada debido a las barreras idiomáticas, lo que ha llevado al Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia a coordinar esfuerzos con los operadores del buque. Este incidente no es aislado; en 2021, un buque de carga chino también se encalló frente a la costa de la localidad sajaliña de Kholmsk, lo que pone de relieve los riesgos asociados a la navegación en esta región durante condiciones climáticas adversas.
