El reciente colapso del Manchester City en la UEFA Champions League ha dejado una huella profunda en el equipo, similar a las experiencias anteriores contra el Feyenoord o el PSG, pero con consecuencias aún más devastadoras. Este resultado supuso la primera derrota del City en casa en la Champions desde septiembre de 2018, poniendo fin a una impresionante racha de 34 partidos invictos en el Etihad Stadium. Con este enfrentamiento, el Real Madrid logró romper una estadística que le había sido esquiva, pues nunca había conseguido un triunfo en sus seis visitas previas al estadio del City. La situación se torna complicada para Pep Guardiola, quien suma ya 12 derrotas en esta temporada, igualando su peor registro profesional hasta la fecha.
Decisiones y Estrategias en el Campo
Guardiola, visiblemente afectado por el resultado, reconoció que las malas decisiones han sido una constante en esta temporada. El técnico español apostó por su experiencia, confiando en los veteranos que habían sido pilares en la conquista de la Champions. Sin embargo, el planteamiento táctico, con cinco defensas, no resultó efectivo, ya que no logró contener las transiciones rápidas del equipo rival. Los 20 remates del Real Madrid durante el encuentro representan un récord negativo para Guardiola, quien no había presenciado tal bombardeo en sus nueve años al mando del City.
Un aspecto notable del partido fue la actuación de Ederson, quien, a pesar de ser considerado el mejor jugador de su equipo por Guardiola, cometió errores que resultaron costosos. Tras un error en la salida del balón que facilitó el segundo gol del Real Madrid, la presión sobre el portero brasileño aumentó. Además, las lesiones de Jack Grealish y Manuel Akanji se sumaron a los problemas del equipo, dejando a Guardiola con pocas alternativas para afrontar el partido de vuelta en el Bernabéu. El City, que había comenzado el partido con algo de control, se vio rápidamente desbordado por la calidad de un Real Madrid que, a pesar de sus dificultades iniciales, supo aprovechar los errores del rival en momentos clave.
El encuentro finaliza con un sabor a despedida para el Manchester City, que se encuentra en una situación crítica en la Champions. A pesar de haber sido uno de los favoritos en ediciones anteriores, el equipo ahora debe enfrentar un escenario complicado, recordando un pasado en el que tuvo que despedirse de la competición en octavos de final hace más de una década. La presión está ahora sobre Guardiola y sus jugadores, quienes deberán encontrar la manera de revertir la situación en el partido de vuelta si quieren mantener vivas sus esperanzas de avanzar en el torneo.
