El impacto del cambio climático en la nieve y la seguridad pública en Nueva York
En Lowville, Nueva York, el departamento del sheriff se prepara para una temporada invernal más severa, ya que el cambio climático está intensificando y haciendo más impredecible la nieve provocada por los lagos. Expertos advierten que estas condiciones meteorológicas son propensas a empeorar, lo que generará aún más desafíos para las fuerzas del orden y los primeros respondedores en todo el país. El sheriff Mike Carpinelli del condado de Lewis ha señalado que las tormentas de nieve en la región pueden intensificarse rápidamente, acumulando a veces un pie de nieve en tan solo un par de horas. Esta rapidez en el cambio del clima dificulta la preparación y la respuesta ante emergencias.
Para hacer frente a esta problemática, Carpinelli y legisladores locales han trabajado durante años para asegurar financiación destinada a la modernización del equipo, incluyendo un vehículo todoterreno diseñado para navegar por la nieve profunda. Este vehículo ha demostrado ser crucial para responder a emergencias en una zona que recibe más de 200 pulgadas de nieve cada invierno. El sheriff destaca la importancia de llegar a los sitios de emergencia lo más rápido posible, pero siempre priorizando la seguridad de sus agentes, ya que en algunas ocasiones el tiempo de respuesta puede variar significativamente, desde media hora hasta varias horas.
El problema del aumento de la nieve no se limita a Lowville. Según Dan Horton, director del Grupo de Investigación sobre Cambio Climático de la Universidad Northwestern, el calentamiento global contribuye a un incremento en la intensidad de la nieve provocada por los lagos. A medida que los lagos se calientan y no se congelan tanto en invierno, el fenómeno de la nieve por efecto de lago se hace más prevalente, ya que el punto de congelación se está retrasando cada vez más en la temporada. Un estudio del gobierno federal de 2017 advirtió sobre el aumento de este fenómeno, sugiriendo que los lagos cálidos están actuando como un «super combustible» para las tormentas de nieve, lo que se traduce en un aumento en la frecuencia y severidad de estas en áreas cercanas a los Grandes Lagos y otros grandes cuerpos de agua. Ante esta situación, las fuerzas policiales en Michigan y Maine han implementado entrenamientos específicos para ayudar a los oficiales a navegar de manera segura por carreteras peligrosas durante el intenso temporal de nieve, evidenciando una creciente adaptación a las nuevas realidades climáticas.
