Un año del escándalo de las mascarillas: avances en la investigación
El próximo viernes se conmemora el primer aniversario de un escándalo que ha sacudido los cimientos del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). El 21 de febrero de 2024, la Guardia Civil detuvo a Koldo García, exasesor del exministro de Transportes, José Luis Ábalos, en relación con el presunto cobro de comisiones ilegales por la adjudicación de contratos para la compra de mascarillas durante la pandemia. En un contexto en el que la crisis sanitaria alcanzaba su punto más álgido, una red de corrupción habría operado, beneficiándose de contratos otorgados sin la debida transparencia, lo que ha generado un gran interés público y político.
La detención de García no solo desencadenó una serie de investigaciones, sino que también colocó a Ábalos en el punto de mira. El exministro, quien ha negado cualquier implicación en el caso, se enfrenta ahora a un nuevo reto legal, ya que el juez Leopoldo Puente ha decidido avanzar en la investigación. Esta semana, Ábalos deberá declarar como investigado, mientras que García se presentará ante el Tribunal Supremo para una prueba caligráfica. El objetivo de esta diligencia es determinar si la escritura de García coincide con la que aparece en los documentos presentados por el empresario Víctor de Aldama, lo que podría arrojar luz sobre la magnitud de las irregularidades.
El juez Puente ha solicitado además un informe patrimonial sobre Ábalos y su hijo, así como un análisis de las comunicaciones entre los implicados en el caso. Estos pasos son esenciales para esclarecer la red de contactos y posibles complicidades en la adjudicación de contratos relacionados con la compra de material sanitario. Entre el 25 de febrero y el 5 de marzo, se llevarán a cabo las declaraciones de 17 testigos, lo que promete aportar información crucial para el avance de esta investigación que ha puesto en jaque la reputación del PSOE y sus líderes.
