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La reciente conversación entre los presidentes de Estados Unidos y Rusia, Donald Trump y Vladimir Putin, ha puesto de manifiesto la creciente preocupación en Europa sobre el papel que la Unión Europea (UE) debe desempeñar en las negociaciones de paz en Ucrania. Este diálogo, el primero desde el inicio del conflicto en febrero de 2022, ha llevado a que el presidente francés, Emmanuel Macron, convoque una cumbre de emergencia con líderes europeos para abordar la situación.
El ministro de Relaciones Exteriores de Polonia, Radoslaw Sikorski, ha expresado su apoyo a la iniciativa de Macron, subrayando la necesidad de que la UE reaccione ante el estilo de negociación de Trump. En sus declaraciones durante la Conferencia de Seguridad de Múnich, Sikorski destacó la importancia de que los líderes europeos discutan de manera seria los desafíos que plantea la situación actual.
La Cumbre de París y la Exclusión de la UE
La cumbre, programada para el lunes en Francia, se produce en un contexto en el que las negociaciones sobre la paz en Ucrania se están llevando a cabo sin la participación de la UE. El enviado especial de EE.UU., Keith Kellogg, ha confirmado que las naciones de la UE no estarán incluidas en las conversaciones, lo que ha generado inquietud entre los líderes europeos sobre su relevancia en el proceso de paz.
El primer ministro polaco, Donald Tusk, ha aceptado la invitación de Macron y asistirá a la cumbre para demostrar la unidad y fortaleza de Europa ante este desafío. Aunque no se ha revelado la lista completa de asistentes, se ha informado que el primer ministro británico, Keir Starmer, también estará presente.
Macron ha defendido en ocasiones anteriores la necesidad de que la UE participe activamente en las negociaciones, argumentando que Ucrania debe liderar las discusiones sobre su soberanía, pero que Bruselas tiene un papel crucial en la discusión de garantías de seguridad y en el marco de seguridad para toda la región.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha reconocido que sus representantes tampoco fueron invitados a las conversaciones en Arabia Saudita, lo que ha generado un sentimiento de exclusión en Kiev. Zelensky comentó que, aunque puede haber propuestas sobre la mesa, no son discutidas en su presencia, lo que refleja la complejidad y la sensibilidad del proceso de paz.
La situación actual plantea interrogantes sobre el futuro de la diplomacia europea y su capacidad para influir en el desenlace del conflicto en Ucrania, especialmente en un contexto donde las decisiones parecen estar siendo tomadas al margen de la UE.