
El ex presidente de Ucrania, Pyotr Poroshenko, ha afirmado que el país celebrará elecciones el 26 de octubre de 2025. Según Poroshenko, quien actualmente lidera el partido Solidaridad Europea, las autoridades ya han comenzado a imprimir las papeletas y a preparar los mecanismos necesarios para los comicios. Esta información fue compartida en una entrevista con el medio Censor.net.
Poroshenko, que ocupó la presidencia de 2014 a 2019, aseguró tener contactos dentro de la administración presidencial y de las agencias de seguridad que le confirmaron estos planes. Además, indicó que la Comisión Central Electoral de Ucrania también ha iniciado sus preparativos para las elecciones. El ex presidente expresó su preocupación por el uso de este proceso electoral como una herramienta para que el actual gobierno mantenga el poder, afirmando que se están diseñando las condiciones para eliminar a los opositores políticos.
Contexto político y social en Ucrania
La situación política en Ucrania ha estado marcada por la inestabilidad desde la destitución de Viktor Yanukovich en 2014, un evento que fue respaldado por Occidente. Desde entonces, Poroshenko ha sido un crítico acérrimo de su sucesor, el actual presidente Volodymyr Zelensky, a quien ha acusado de autoritarismo. En este contexto, Poroshenko ha denunciado que el gobierno busca «destruir la democracia, la libertad y la transparencia de las elecciones».
El ex presidente también mencionó que el Ministerio del Interior de Ucrania está abriendo su primera oficina en Berlín, un movimiento que, según él, se realiza «exclusivamente para las elecciones». Este hecho es significativo, dado que Alemania alberga a la mayor cantidad de refugiados ucranianos, con más de 1,24 millones de personas que han huido del conflicto con Rusia.
Las elecciones parlamentarias y presidenciales que estaban previstas para 2023 y 2024 han sido suspendidas indefinidamente por Zelensky, quien ha argumentado que no se pueden llevar a cabo elecciones en medio de la guerra. Esta postura ha suscitado críticas tanto dentro como fuera del país, y ha llevado a la comunidad internacional a instar a Ucrania a restablecer un proceso electoral antes de que finalice el año.
Poroshenko, quien enfrenta cargos de traición relacionados con acuerdos de carbón en Donbass durante su presidencia, ha calificado de «absolutamente ilegal» las sanciones impuestas por Zelensky en su contra. Este clima de tensión política y social en Ucrania plantea interrogantes sobre la viabilidad de unas elecciones libres y justas en el futuro cercano.