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Astrónomos han identificado el dióxido de azufre como un indicador potencialmente crucial en la búsqueda de vida en otros planetas. Aunque la presencia de azufre por sí sola no indica la habitabilidad, concentraciones significativas de dióxido de azufre en la atmósfera de un planeta pueden sugerir que este es poco probable que sea habitable, permitiendo a los investigadores eliminarlo de futuras consideraciones.
La búsqueda de vida extraterrestre sigue siendo uno de los objetivos más deseados en la astronomía moderna. Sin embargo, este es un desafío formidable. Se considera que el Telescopio Espacial James Webb no logrará detectar firmas biológicas, es decir, gases atmosféricos producidos por organismos vivos, en planetas cercanos. De igual manera, el futuro Observatorio de Mundos Habitables solo podrá evaluar un número limitado de exoplanetas potencialmente habitables.
El papel del dióxido de azufre en la habitabilidad planetaria
Uno de los principales obstáculos que enfrentan los astrónomos es la naturaleza típicamente tenue de los espectros de las firmas biológicas. Para abordar esto, se centran en el potencial de los planetas para albergar vida, especialmente a través de la presencia de vapor de agua en sus atmósferas. Un planeta con un vapor de agua sustancial puede tener más probabilidades de soportar vida.
Este concepto se encapsula en la zona habitable, la región alrededor de una estrella donde un planeta recibe la cantidad justa de radiación: no tan poca como para congelar toda el agua, y no tan mucha como para hacerla hervir. En nuestro sistema solar, Venus se encuentra cerca del límite interno de la zona habitable, con temperaturas superficiales que superan los 400 grados Celsius bajo una densa atmósfera, mientras que Marte se sitúa principalmente fuera de la zona, con su agua atrapada en casquetes polares y reservorios subterráneos.
Sin embargo, detectar agua por sí sola presenta dificultades. Por ejemplo, distinguir entre las atmósferas de la Tierra y Venus basándose únicamente en el vapor de agua es complicado debido a sus similitudes. Recientemente, en un estudio publicado en la revista Science Advances, un equipo de astrónomos ha identificado el dióxido de azufre como un gas indicador adicional que puede ayudar a diferenciar los mundos inhabitados de aquellos potencialmente habitables.
Los planetas cálidos y húmedos como la Tierra contienen cantidades mínimas de dióxido de azufre porque este es eliminado de la atmósfera por la lluvia. Por el contrario, Venus también presenta poco dióxido de azufre detectable, ya que la radiación ultravioleta del sol lo convierte en sulfuro de hidrógeno en la atmósfera superior, empujándolo hacia abajo. Por otro lado, los planetas que orbitan estrellas enanas rojas presentan un escenario diferente. Estas estrellas emiten una radiación ultravioleta mínima, lo que permite que el dióxido de azufre persista en las atmósferas superiores de planetas secos y poco habitables.
Las enanas rojas son de particular interés porque son el tipo de estrella más común en la galaxia, y muchos sistemas cercanos, como Proxima Centauri y TRAPPIST-1, albergan planetas que orbitan alrededor de estas estrellas, lo que los convierte en objetivos privilegiados para futuras búsquedas de vida.
Este nuevo enfoque que involucra el dióxido de azufre no identifica planetas que puedan albergar vida, sino que ayuda a excluir a aquellos que probablemente no lo hagan. Si se detecta un dióxido de azufre significativo en la atmósfera de un planeta rocoso que orbita una enana roja, sugiere un mundo seco y caliente con una atmósfera densa y poca o ninguna agua, similar a Venus. Así, estos planetas pueden ser despriorizados en la búsqueda de vida.
Por el contrario, la ausencia de dióxido de azufre significativo puede indicar que un planeta merece observaciones adicionales en busca de vapor de agua y posibles signos de vida. La búsqueda de vida en otros planetas requerirá esfuerzos investigativos extensos y una determinación inquebrantable. Cualquier método, incluida el análisis de los niveles de dióxido de azufre para agilizar las listas de candidatos, es altamente valioso en este empeño.