La misión SPHEREx de la NASA: un nuevo observatorio para mapear el universo
La NASA se prepara para el lanzamiento de un nuevo observatorio espacial, la misión SPHEREx (Spectro-Photometer for the History of the Universe, Epoch of Reionization and Ices Explorer), que tiene como objetivo mapear más de 450 millones de galaxias. Este ambicioso proyecto se llevará a cabo desde la Base de la Fuerza Espacial de Vandenberg en California, con un despegue programado para el jueves a las 10:09 p.m. hora del Este. La nave espacial, con forma de cono, será lanzada al espacio a bordo de un cohete Falcon 9 de SpaceX, junto con cuatro satélites adicionales destinados a estudiar el Sol.
La misión SPHEREx, que ha estado en desarrollo durante aproximadamente una década y cuenta con un presupuesto de 488 millones de dólares, tiene la intención de realizar un mapeo del cielo en 102 colores infrarrojos. Esta capacidad supera a cualquier otra misión previa y permitirá a los científicos observar algunas de las estrellas y galaxias más antiguas del universo, que de otro modo estarían ocultas por el polvo y el gas. Utilizando técnicas de espectroscopía, los investigadores podrán separar la luz infrarroja emitida por estos cuerpos celestes en diferentes colores, obteniendo información valiosa sobre su composición, densidad, temperatura y movimiento.
Además de mapear las galaxias, la misión SPHEREx se propone abordar el enigma de lo que ocurrió en los primeros momentos tras el Big Bang, que ocurrió hace aproximadamente 13.8 mil millones de años. Una de las teorías más destacadas, conocida como inflación cósmica, sugiere que el universo experimentó una expansión extraordinaria en fracciones de segundo después del Big Bang. A través del mapeo tridimensional de cientos de millones de galaxias, la misión tendrá la capacidad de probar modelos de inflación y contribuir a una comprensión más profunda de la física fundamental que rige nuestro universo. Este avance en el conocimiento podría no solo aclarar el origen de las galaxias, sino también proporcionar pistas sobre la formación del agua y otros materiales orgánicos en nuestra propia galaxia, la Vía Láctea.
