Los nuevos polluelos de las águilas calvas de Big Bear
En los últimos días, la expectación ha ido en aumento en torno a la reciente prole de Jackie y Shadow, las conocidas águilas calvas de Big Bear. Este jueves, se observó un «pip», es decir, el primer signo de eclosión, en el tercer huevo de la pareja aviar. La posibilidad de que nazcan trillizos sería un hecho sin precedentes en la década de observación de estas aves en el entorno natural.
Sandy Steers, directora ejecutiva de Friends of Big Bear Valley, la organización que gestiona la webcam que transmite en directo el nido, indicó: «Esta mañana, vimos el pip en el tercer huevo y el agujero ha crecido». El polluelo está «trabajando activamente para salir del huevo». Este proceso puede tardar varios días, como ocurrió con los otros dos polluelos que ya han eclosionado esta semana.
Los dos polluelos que ya han salido del cascarón están en buen estado y han comenzado a alimentarse, aunque a veces se distraen picoteándose entre ellos en lugar de centrarse en la comida, lo cual es un comportamiento normal en estas aves. Steers recordó a los seguidores que esta rivalidad entre hermanos es parte del ciclo natural y que las preocupaciones sobre el bienestar de los polluelos son comunes, pero deben entenderse en el contexto de la vida salvaje.
Desde que Friends of Big Bear Valley comenzó a observar a Jackie y Shadow en 2015, no se había registrado el nacimiento de tres polluelos al mismo tiempo. En 2019, la pareja tuvo dos crías; en 2022, un polluelo y un huevo que no eclosionó; y el año pasado, tres huevos que no lograron eclosionar. Steers comentó sobre la importancia de observar cómo se relacionan los tres polluelos y sus padres: «Aprenderemos cómo se tratan entre ellos y cómo se comportan».
Un mayor número de crías implica más alimentación. Shadow ya ha traído tres peces al nido el miércoles, por lo que los polluelos tendrán suficiente comida. Los dos polluelos que ya han nacido, cuyo nombre será elegido por el público en los próximos días, «se ven mucho más fuertes que ayer», según Steers. «No puedo describir lo emocionada que estoy», añadió, destacando que la transmisión en directo está alcanzando niveles récord de audiencia. «Me llena el corazón ver que la gente se conecta con la naturaleza y la aprecia».
Los espectadores que se preocupen por los efectos del clima invernal pueden estar tranquilos respecto a la capacidad de Jackie y Shadow para cuidar de sus crías. La lluvia y la nieve pueden hacer que los padres reduzcan la frecuencia de las alimentaciones para limitar la exposición de los polluelos a las inclemencias del tiempo. Sin embargo, todos los polluelos son lo suficientemente pequeños como para acomodarse bajo el abrigo de uno de sus padres. «Jackie y Shadow están aislados y son impermeables», aseguró Steers, añadiendo que su temperatura corporal de 40 grados Celsius mantendrá a sus crías bien calentitas. A medida que los polluelos crezcan, puede haber problemas para que todos quepan bajo sus padres y se mantengan calientes, pero este no es un problema inmediato.
Steers también advirtió a los espectadores que están siendo testigos de la naturaleza sin filtros, donde pueden ocurrir imprevistos: «Solo tenemos que dejar que vivan y apreciar que podemos observar esta magia».
