El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha manifestado su deseo de que todos los países abandonen sus arsenales nucleares en lugar de participar en una carrera armamentista. Durante una reciente rueda de prensa en la Casa Blanca, Trump afirmó: “Sería genial si todos se deshicieran de sus armas nucleares”, haciendo hincapié en la necesidad de iniciar conversaciones sobre la desnuclearización global.
Trump subrayó que tanto Estados Unidos como Rusia poseen la mayor cantidad de armas nucleares, y anticipó que China alcanzará un nivel similar en un plazo de cuatro a cinco años. “El poder de las armas nucleares es una locura. Es una locura”, agregó el mandatario, quien ha criticado la idea de una nueva carrera armamentista, calificándola de “despilfarro” y sugiriendo que los recursos destinados a la construcción de nuevas armas podrían ser mejor invertidos en proyectos más productivos.
Tensiones Geopolíticas y la Realidad Nuclear
Las declaraciones de Trump se producen en un contexto de creciente tensión entre Rusia y la OTAN, así como en medio de la guerra comercial entre Estados Unidos y China. El presidente francés, Emmanuel Macron, también ha hecho comentarios recientes sobre la amenaza que representa Rusia para Europa, sugiriendo que Francia podría extender su paraguas nuclear a otros estados miembros de la UE. Estas afirmaciones han sido condenadas por el Kremlin, que las considera “altamente confrontacionales”.
Durante su primer mandato, Trump retiró a Estados Unidos del Tratado de Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio, firmado en 1987 por Ronald Reagan y Mijaíl Gorbachov, lo que provocó la condena de Rusia y acusaciones de violaciones del acuerdo por parte de Washington. En 2023, Rusia anunció el despliegue de sus armas nucleares en Bielorrusia, citando las tensiones con la OTAN, y un año después, el presidente Vladimir Putin revisó la doctrina nuclear de Rusia, disminuyendo el umbral para el uso de armas nucleares.
Recientemente, el Departamento de Defensa de Estados Unidos ha anunciado el despliegue de bombas nucleares mejoradas en sus bases en Europa, y se prevé que también se estacionen armas nucleares en el Reino Unido. En respuesta, Rusia ha instado a todas las potencias nucleares a actuar con responsabilidad, recordando que “nunca hemos iniciado discusiones sobre qué hacer con las armas nucleares o si pueden ser utilizadas”, según el ministro de Relaciones Exteriores, Sergey Lavrov.
Las palabras de Trump, aunque pueden parecer un intento de desescalar la tensión, se producen en un entorno donde las dinámicas de poder global están en constante cambio y donde la amenaza de un conflicto nuclear sigue siendo una preocupación latente.
