Alicia Love, propietaria de Coffee Labs Roasters en Tarrytown, Nueva York, ha experimentado en carne propia las dificultades del mercado del café, que ha visto un aumento vertiginoso en los precios. Tradicionalmente, Love solía adquirir los granos más populares mediante un acuerdo anual con su importador de café. Sin embargo, al final del año pasado, los precios alcanzaron niveles tan elevados que decidió esperar a que el mercado se estabilizara. Desafortunadamente, los precios continuaron escalando, lo que la llevó a firmar un nuevo contrato para un suministro de tres meses, esperando que pronto se produzcan cambios favorables en el mercado.
El costo inicial de los granos habría sido de aproximadamente 4 dólares por bolsa, mientras que el nuevo acuerdo se firmó a unos 5 dólares por bolsa. Este aumento en el precio del café se suma a la presión económica que sienten los consumidores en Estados Unidos, donde productos básicos como los huevos también han visto un incremento drástico, reportando un aumento del 53% interanual, según datos del índice de precios al consumidor.
Presiones en el mercado del café y los huevos
La situación en el sector avícola es preocupante debido a un brote devastador de gripe aviar que ha llevado al sacrificio de millones de gallinas, exacerbando la crisis de precios. Además, el Departamento de Justicia de EE.UU. ha abierto una investigación por prácticas antimonopolio en la industria, lo que podría arrojar más luz sobre las causas de estos incrementos.
En cuanto al café, la sequía en Brasil, uno de los principales productores a nivel mundial, ha impactado severamente en los rendimientos de las cosechas, llevando los precios de futuros a superar los 4 dólares por libra por primera vez en la historia. Andrew Blyth, gerente de operaciones de comercio de café en Royal New York, ha señalado que la volatilidad del mercado es un desafío significativo, tanto para los comerciantes como para los consumidores, que se ven obligados a cambiar sus hábitos de compra.
La presión sobre los precios ha llevado a los consumidores a reconsiderar sus elecciones alimenticias, especialmente en el desayuno, que tradicionalmente ha sido una comida económica. Robert Byrne, director senior de investigación de consumidores en Technomic, indica que los restaurantes que ofrecen desayunos, como IHOP y Denny’s, están bajo una presión considerable, lo que ha llevado a algunos a implementar recargos por los productos que contienen huevos.
Los efectos de la inflación también son evidentes en las acciones de las compañías de restaurantes, muchas de las cuales han visto una caída significativa en su valor en el mercado. Dine Brands, la empresa matriz de IHOP, ha pronosticado un aumento de costos impulsado principalmente por los precios de los huevos, lo que sugiere que la industria se enfrenta a un panorama complicado en el futuro cercano.
Además, el impacto de las políticas comerciales de Estados Unidos podría añadir más presión a los precios del café. Love ha advertido que los aranceles propuestos podrían complicar aún más la situación, especialmente para el café descafeinado que depende de procesos transfronterizos. Este tipo de medidas proteccionistas, aunque justificadas en el contexto de la defensa de la producción local, pueden tener repercusiones negativas en el consumidor final, aumentando los costos en un sector ya de por sí golpeado por la inflación.
