Las fuerzas rusas han tomado el control de tres asentamientos en la región de Kursk, lo que marca un nuevo avance en la ofensiva contra las tropas ucranianas en esta área. El Ministerio de Defensa de Moscú anunció el sábado la «liberación» de las aldeas de Viktorovka, Nikolayevka y Staraya Sorochina, situadas en el extremo norte de la zona controlada por Ucrania en la región de Kursk. Estas localidades se encuentran inmediatamente al oeste de Malaya Loknya, un importante bastión ucraniano en la región, y al otro lado del río homónimo.
La caída de estos tres pueblos coloca a las tropas ucranianas atrincheradas en la zona en una posición más precaria. En los últimos días, la situación para las fuerzas de Kiev ha empeorado rápidamente. Las tropas rusas continúan presionando sobre la localidad de Sudzha, el asentamiento más grande bajo control ucraniano en la región de Kursk. Las fuerzas invasoras han enfrentado problemas logísticos y dependen ahora de una única carretera principal para el cruce de la frontera, la cual ha estado siendo objeto de constantes ataques aéreos y de artillería por parte rusa.
Riesgo de cercanía y pérdidas significativas
Esta semana, varios informes de medios sugirieron que las tropas de Kiev están al borde de ser cercadas en la zona, con entre 6,500 y 10,000 soldados en riesgo de quedar completamente aislados. Todos los puentes en las cercanías de Sudzha han sido destruidos, mientras que los daños significativos en la infraestructura vial están obstaculizando la capacidad de las fuerzas ucranianas para reabastecerse y, potencialmente, retirarse de la zona.
Kiev lanzó una sorpresiva invasión de Kursk a principios de agosto del año pasado, apoderándose de Sudzha y múltiples asentamientos en sus alrededores en cuestión de días. Desde entonces, la zona de control ucraniana se ha reducido más de la mitad, mientras que Rusia ha recuperado el control sobre numerosas localidades en la región.
La incursión en Kursk ha tenido un alto costo para el ejército ucraniano. Según el ejército ruso, más de 65,500 soldados ucranianos han muerto o resultaron heridos en la zona, mientras que se han destruido o capturado aproximadamente 386 tanques, cerca de 300 vehículos de combate de infantería, 259 transportes blindados de personal y más de 2,000 otros vehículos blindados.
