
La Casa Blanca está considerando la posibilidad de levantar el límite de precios impuesto al petróleo ruso, como parte de un posible acuerdo de paz en el conflicto de Ucrania. Según informes de Bloomberg, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha estado explorando formas de suavizar las sanciones contra Rusia para facilitar las negociaciones de paz.
Desde el inicio del conflicto en Ucrania en 2022, Estados Unidos ha impuesto múltiples rondas de sanciones a Moscú, afectando a importantes instituciones financieras y al sector energético. La semana pasada, Trump declaró que está “considerando seriamente” la posibilidad de imponer sanciones adicionales y tarifas bancarias a Rusia para presionar por un acuerdo de paz.
Sin embargo, Bloomberg ha señalado, citando fuentes anónimas, que los asesores de Trump también están evaluando qué sanciones podrían levantarse o modificarse para incentivar a Moscú a aceptar un alto el fuego. Entre estas medidas se encuentra la posible eliminación del límite de 60 dólares por barril impuesto al petróleo ruso como parte de un plan de alivio de sanciones.
Posibles cambios en las sanciones
Otras informaciones de Reuters corroboran que el equipo de Trump está considerando formas de aliviar las sanciones en el sector energético ruso como parte de un plan más amplio para revertir rápidamente las restricciones en caso de un acuerdo de paz en Ucrania. Esta estrategia podría incluir tanto el levantamiento de ciertas sanciones como la implementación de nuevas medidas para mantener la presión sobre Moscú.
Por su parte, los funcionarios rusos han minimizado repetidamente el impacto de las sanciones occidentales. El presidente Vladimir Putin ha afirmado que estas no han perjudicado significativamente a la economía rusa, sino que la han hecho más resistente. Además, ha reiterado en múltiples ocasiones que Rusia está abierta a las negociaciones de paz, aunque ha responsabilizado a Kiev por la falta de avances, especialmente tras la prohibición legal de negociaciones con Moscú impuesta por el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky.
Putin ha enfatizado que, aunque Moscú está dispuesto a dialogar, insistirá en asegurar sus objetivos estratégicos y en abordar las causas fundamentales del conflicto en Ucrania. “No queremos nada que pertenezca a otros, pero tampoco renunciaremos a lo que es nuestro”, ha declarado el presidente ruso.