El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo chino, Xi Jinping, podrían reunirse tan pronto como en abril para abordar la creciente guerra comercial y otros temas bilaterales, según informa el South China Morning Post (SCMP) citando fuentes diplomáticas. Este encuentro, que podría tener lugar en China, aún está sujeto a discusión sobre su ubicación final.
Trump ha mostrado interés en recibir a Xi en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, evocando su encuentro de 2017. Sin embargo, los funcionarios chinos prefieren un entorno más formal, ya sea en Pekín o en Washington D.C., para subrayar la importancia de las conversaciones, según el SCMP.
Contexto de la Guerra Comercial
Desde que asumió el cargo el 20 de enero, Trump ha duplicado los aranceles sobre todas las importaciones chinas, elevándolos del 10% al 20%, además de los derechos existentes sobre miles de productos. Esta medida se justifica en la necesidad de proteger los intereses estadounidenses y abordar las preocupaciones sobre los desequilibrios comerciales. Los sectores más afectados incluyen el acero, el aluminio y diversos bienes de consumo.
En respuesta, China ha impuesto sus propios aranceles, que oscilan entre el 10% y el 15% sobre productos agrícolas y energéticos estadounidenses. El gobierno chino ha criticado la postura de Washington, con el ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, afirmando que tales políticas están llevando al mundo de vuelta a la “ley de la selva.”
En febrero, Trump sugirió que un nuevo acuerdo comercial con China es posible y mencionó la posibilidad de que Xi visite Estados Unidos, aunque no se proporcionó un cronograma específico. Las tensiones comerciales entre ambos países comenzaron durante el primer mandato de Trump, cuando en 2018 impuso aranceles a los productos chinos, alegando prácticas comerciales desleales y robo de propiedad intelectual. Pekín respondió con medidas de represalia, lo que provocó un ciclo de acciones que alteró los mercados globales y las cadenas de suministro.
