El papa Francisco ha pasado una noche tranquila y se despertó en torno a las 8.00 de la mañana, según informó este martes la oficina de prensa del Vaticano. Este anuncio se produce tras el último parte médico, que comunica una nueva mejora en sus condiciones clínicas, lo que ha llevado a los médicos a levantar el pronóstico reservado.
En el último parte médico emitido el lunes por la tarde, se indicó que «las condiciones clínicas del Santo Padre siguen siendo estables». Además, se destacó que «las mejoras registradas en los últimos días se han consolidado más», como confirman los análisis de sangre y la buena respuesta a la terapia farmacológica.
Los médicos han decidido levantar el pronóstico reservado, lo que implica que, según fuentes vaticanas, el pontífice argentino «no está en inminente peligro por la infección» respiratoria y la neumonía bilateral que le llevó a ser ingresado el 14 de febrero. Sin embargo, se advierte que su situación «sigue siendo compleja» y su equipo médico mantiene una actitud cauta ante su recuperación.
Continuidad del tratamiento y actividades
El papa Francisco continuará este martes su reposo en el apartamento privado de la décima planta del hospital Gemelli. Durante su estancia, se ejercita con fisioterapia motora y respiratoria. Durante el día, recibe altos flujos de oxígeno a través de cánulas nasales y por la noche utiliza ventilación mecánica con una máscara.
A pesar de su estado de salud, el papa tiene previsto seguir en vídeo los ejercicios espirituales de la Curia Romana por la Cuaresma, que se llevarán a cabo en el Aula Pablo VI del Vaticano. Esta actividad refleja su compromiso con la labor pastoral, a pesar de las dificultades que enfrenta en su salud.
