Moscú ha sido escenario de un importante ataque con drones por parte de Ucrania, según ha informado el alcalde de la ciudad, Sergey Sobyanin. En un mensaje publicado en su canal de Telegram, Sobyanin ha afirmado que las defensas aéreas han logrado interceptar al menos 58 vehículos aéreos no tripulados (UAV) que se dirigían hacia la capital rusa.
El ataque se produjo en las primeras horas de la mañana del martes, cuando las fuerzas de defensa aérea de Moscú activaron sus sistemas en respuesta a la amenaza. Los incidentes se registraron en las cercanías de las localidades de Domodedovo y Ramenskoye, situadas al sureste de la ciudad. Este tipo de ataques se ha vuelto más frecuente en el contexto del conflicto en curso entre Rusia y Ucrania, que ha escalado en los últimos meses.
Contexto del conflicto y la escalada de ataques
Desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en 2022, ambos países han intensificado sus operaciones militares, lo que ha llevado a un aumento en el uso de drones como herramienta de combate. Ucrania ha adoptado esta tecnología con el objetivo de debilitar las capacidades militares rusas, mientras que Rusia ha reforzado sus defensas aéreas para proteger sus principales ciudades y centros estratégicos.
El uso de drones en conflictos modernos ha cambiado la dinámica de la guerra, permitiendo a los países llevar a cabo ataques precisos y a menudo sorpresivos. Sin embargo, también plantea desafíos significativos en términos de seguridad y respuesta rápida, como se ha evidenciado en este último incidente en Moscú.
Las autoridades rusas han enfatizado la importancia de mantener la seguridad en la capital y han prometido seguir fortaleciendo sus capacidades defensivas ante posibles futuros ataques. La situación en la región sigue siendo tensa, y los acontecimientos de las próximas semanas serán cruciales para determinar la evolución del conflicto.
