
El grupo terrorista Al-Shabaab ha reivindicado la responsabilidad del ataque perpetrado en el Hotel Cairo, ubicado en la ciudad de Beledweyne, en el centro de Somalia. Según informes, el asalto ha dejado un saldo de al menos diez muertos, aunque las cifras varían según las fuentes. Un testigo, que habló con la agencia Associated Press, indicó que tres de sus familiares se encontraban entre las once personas que conocía que habían fallecido. Por su parte, un anciano de la comunidad, Abdullahi Fidow, mencionó que el número de víctimas asciende a siete.
El ataque, que tuvo lugar el pasado martes, comenzó con la explosión de un coche bomba en la entrada del hotel, donde se encontraban líderes locales y funcionarios del gobierno planificando una ofensiva contra la organización yihadista. Posteriormente, los atacantes ingresaron al edificio, lo que dio lugar a intensos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad somalíes.
Imágenes difundidas en redes sociales mostraron una densa columna de humo saliendo del hotel, que sufrió daños significativos en sus estructuras debido a la explosión. La situación se complicó aún más, ya que los atacantes se atrincheraron en el interior del establecimiento, lo que prolongó el asedio durante más de diez horas.
Los hombres armados de Al-Shabaab permanecen atrincherados dentro de un hotel en la ciudad de Baladweyne, mientras las fuerzas de seguridad somalíes, apoyadas por pacificadores de #Djibouti y #Ethiopia, continúan los esfuerzos para poner fin al asedio que se ha prolongado por más de 10 horas.
El medio Universal Somali TV informó el miércoles que el asedio había finalizado tras más de 24 horas de intensos combates entre los militantes y las tropas somalíes, junto a sus aliados etíopes y yibutianos. Al-Shabaab sigue siendo la organización terrorista dominante en Somalia, llevando a cabo ataques con explosivos y armados contra civiles e infraestructuras militares con el objetivo de desestabilizar al gobierno y establecer su propio control.
A pesar de haber sido expulsados de la capital somalí, Mogadishu, en 2011 por una fuerza de mantenimiento de la paz de la Unión Africana, el grupo aún controla diversas áreas en las regiones del sur y centro del país. En agosto pasado, más de 30 personas perdieron la vida en un ataque terrorista en la playa de Lido, en Mogadishu, donde cuatro hombres armados abrieron fuego indiscriminadamente, mientras un suicida detonó un artefacto explosivo.
El mes pasado, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó ataques aéreos de precisión en la región de Bari, en Somalia, dirigidos contra un planificador de ataques del Estado Islámico y otros militantes, lo que resultó en la destrucción de escondites terroristas y la muerte de varios de ellos.