
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado que es probable que mantenga conversaciones telefónicas con su homólogo ruso, Vladimir Putin, esta semana. Trump expresó su esperanza de que Moscú acepte una propuesta de alto el fuego de 30 días en Ucrania, un acuerdo que, según él, facilitaría la consecución de un acuerdo final para poner fin al conflicto.
Las declaraciones del presidente estadounidense se produjeron poco después de que delegaciones de Ucrania y Estados Unidos se reunieran en Jeddah, Arabia Saudita, donde Kiev accedió a la propuesta de Washington para un alto el fuego con Moscú. Trump afirmó que alcanzar dicho acuerdo representaría un gran avance en las negociaciones, indicando que “eso sería el 75 por ciento del camino. El resto es documentar el acuerdo, negociar posiciones territoriales, etc.”
Reacciones y expectativas
En caso de que Rusia no acepte el alto el fuego, Trump advirtió que “simplemente continuaremos”, señalando que “mucha gente” podría perder la vida. Se espera que funcionarios rusos y estadounidenses se reúnan “hoy y mañana” para discutir los términos de este posible acuerdo.
Tras las declaraciones de Trump, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, indicó que no se puede descartar la posibilidad de contactos entre Moscú y Washington en los próximos días. Según un periodista del pool del Kremlin, se prevé que la conversación telefónica entre los presidentes de EE. UU. y Rusia se lleve a cabo el viernes.
Hasta el momento, Moscú no ha ofrecido una reacción oficial a las declaraciones realizadas tras la conclusión de las conversaciones entre Estados Unidos y Ucrania en Jeddah. Anteriormente, altos funcionarios rusos habían manifestado que una tregua temporal no resolvería el conflicto ucraniano, sugiriendo que es necesario abordar los problemas de fondo.
Desde la perspectiva rusa, una pausa en las hostilidades solo serviría para que Kiev y sus aliados se rearmen y se preparen para una nueva ronda de combates.