
La odisea espacial de Butch Wilmore y Suni Williams
El pasado 5 de junio de 2024, los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams se convirtieron en los primeros en ser lanzados al espacio a bordo de una cápsula Boeing Starliner. La misión, inicialmente planeada para durar solo ocho días, se ha prolongado más de nueve meses debido a problemas técnicos inesperados. Durante la aproximación al espacio, los motores de la cápsula comenzaron a fallar, lo que obligó a los dos experimentados pilotos a tomar el control manualmente para completar el acoplamiento con la Estación Espacial Internacional (EEI). A pesar de que lograron acoplarse sin problemas, la situación se complicó cuando comenzaron a surgir fugas de helio, lo que llevó a la NASA a mantener a los astronautas en la EEI mientras se investigaban las causas de los fallos.
A medida que los meses pasaron, la incertidumbre sobre el regreso de Wilmore y Williams se convirtió en la norma. Los ingenieros de Boeing no lograron determinar la razón detrás de las fallas de los motores de la Starliner, lo que llevó a la NASA a decidir que la cápsula debería regresar a la Tierra vacía para evaluar su integridad. Con SpaceX como el único medio de transporte disponible para su regreso, la situación se volvió aún más compleja. La misión de SpaceX programada para septiembre de 2024 tuvo que ser ajustada, dejando asientos vacíos en la cápsula de regreso para facilitar el retorno de los astronautas, quienes finalmente se espera que regresen a la Tierra a finales de marzo.
A pesar de las adversidades, tanto Wilmore como Williams han mantenido una actitud positiva durante su prolongada estancia en el espacio. Ambos astronautas han estado ocupados realizando experimentos científicos y han tenido la oportunidad de realizar una caminata espacial, en la cual Williams estableció un récord como la mujer con más tiempo en caminatas espaciales. La comunicación diaria con sus familias ha sido un baluarte emocional en este tiempo de espera, aunque reconocen que la situación es más difícil para sus seres queridos en la Tierra. Al final de su misión, los astronautas serán recibidos con un protocolo que incluye un periodo de recuperación para adaptarse a la gravedad terrestre, reflejando los desafíos que enfrentan los astronautas al regresar de misiones prolongadas.