El presidente francés, Emmanuel Macron, y el canciller en funciones de Alemania, Olaf Scholz, han manifestado su optimismo tras el reciente acuerdo que propone una pausa de 30 días en los ataques a las infraestructuras energéticas de Rusia y Ucrania. Este acuerdo, según ambos líderes, podría representar un primer paso hacia la paz en un conflicto que ya se prolonga durante tres años.
Durante una rueda de prensa conjunta en Berlín, Macron destacó que las últimas conversaciones entre Vladimir Putin y Donald Trump apuntan en una dirección favorable. «Las últimas conversaciones van en la buena dirección», afirmó el presidente francés, quien subrayó la importancia de este diálogo para abordar la actual fase de la guerra.
Compromiso con Ucrania
A pesar de este avance, Macron ha reafirmado el compromiso de Francia de continuar apoyando al Ejército ucraniano. «Tenemos razón en hacerlo», declaró, en clara oposición a la demanda de Putin, quien solicitó a Trump el cese total de la ayuda militar extranjera a Ucrania. Esta postura refleja la determinación de los líderes europeos de mantener su apoyo a Ucrania, a pesar de los intentos de Rusia por desestabilizar la región.
El contexto de este acuerdo es crucial, ya que se produce en un momento en que la guerra ha dejado profundas cicatrices en ambos países y ha afectado a la seguridad energética de Europa. La cooperación entre Francia y Alemania se presenta como un pilar fundamental en la búsqueda de una solución duradera al conflicto, destacando la necesidad de un enfoque diplomático que priorice la estabilidad en la región.
