
Desde la aparición del movimiento #MeToo en 2017, los coordinadores de intimidad han comenzado a integrarse de manera creciente en los rodajes de cine y televisión, con el objetivo de garantizar que tanto los actores como el equipo se sientan seguros y respaldados durante las escenas íntimas. Sin embargo, este rol ha suscitado un intenso debate en la industria del entretenimiento.
Actores como Ewan McGregor, Emma Stone y Jonathan Bailey han elogiado la inclusión de coordinadores de intimidad en los sets, señalando su importancia en la creación de un ambiente de trabajo seguro. No obstante, algunos otros, como Gwyneth Paltrow, han manifestado que la presencia de un coordinador no siempre es necesaria y que puede no adaptarse a todos los actores.
Paltrow, en una reciente entrevista, expresó su desconocimiento sobre la figura del coordinador de intimidad antes de rodar escenas con su compañero Timothée Chalamet. Afirmó que, tras discutir con el coordinador sobre su comodidad con ciertas acciones, ambos decidieron continuar sin una supervisión constante, argumentando que su experiencia en el medio les permitía trabajar con libertad.
Por otro lado, Mikey Madison, quien ganó un Oscar por su papel en Anora, también optó por no trabajar con un coordinador de intimidad en su última película, eligiendo mantener el equipo reducido para facilitar el rodaje. Kim Basinger, otra actriz galardonada, se mostró escéptica respecto a la necesidad de esta figura, afirmando que la comunicación directa entre los actores es suficiente para gestionar las escenas íntimas.
A pesar de estas opiniones, los coordinadores de intimidad desempeñan un papel crucial en la industria, asegurando que las escenas de sexo se filmen de manera segura y ética. Su labor no se limita a trabajar con los actores, sino que también se extiende al equipo completo, mitigando dinámicas de poder que históricamente han permitido la coerción en los sets. Jessica Steinrock, CEO de la organización Intimacy Directors and Coordinators, explica que estos profesionales son fundamentales para garantizar la autonomía corporal y el consentimiento de todos los involucrados en el proyecto.
Los coordinadores no solo se encargan de la coreografía de las escenas, sino que también ofrecen opciones narrativas que respetan los límites de los actores, al mismo tiempo que cumplen con la visión del director. Amanda Cutting, una coordinadora de intimidad con experiencia en producciones como The Good Doctor, subraya que su función abarca desde la planificación de las escenas hasta la gestión de las condiciones de trabajo, garantizando que todos los participantes se sientan cómodos.
La figura del coordinador de intimidad ha ganado terreno en la industria, especialmente tras la aprobación de las nuevas normas del sindicato SAG-AFTRA en 2023, que exigen a los productores hacer «el mayor esfuerzo» para contratar a estos profesionales en escenas que involucren desnudos o sexo simulado. Esta evolución ha llevado a muchos en la industria a considerar a los coordinadores de intimidad como miembros estándar del equipo, similar a los coordinadores de acrobacias.
Sin embargo, a pesar de los avances, el papel de los coordinadores de intimidad sigue siendo objeto de debate. Aunque algunos actores eligen prescindir de su ayuda, hay una creciente demanda de su participación en la fase de preproducción, en lugar de ser considerados solo en el set. Este cambio refleja un reconocimiento de la importancia de su labor en la creación de un ambiente de trabajo seguro y profesional.
Aunque hay quienes aún no ven la necesidad de estos profesionales, la mayoría de los testimonios sobre su trabajo en producciones destacan resultados positivos. Se observa que su presencia no solo beneficia a los actores, sino también al equipo en su conjunto, asegurando que todos los involucrados se sientan respetados y apoyados en su labor creativa.