
Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) han interceptado un misil balístico lanzado por los rebeldes hutíes de Yemen, marcando el primer ataque de este tipo en dos meses. Según informes de medios israelíes, el misil fue detenido antes de cruzar la frontera del país, activándose las sirenas de alerta como parte del protocolo de seguridad.
El portavoz militar de los hutíes, Ameen Hayyan, afirmó que el misil estaba dirigido al Aeropuerto Internacional Ben Gurion. Este grupo controla una gran parte del oeste de Yemen, incluida su capital, Saná, y ha intensificado sus ataques contra la navegación internacional y lanzamientos de misiles hacia Israel en respuesta a las operaciones del IDF contra Hamas en Gaza.
Reacciones internacionales y escalada del conflicto
El fin de semana, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó una serie de bombardeos aéreos y ataques con misiles de crucero contra posiciones hutíes. En una declaración el miércoles, advirtió que el grupo “será completamente aniquilado”. Esta escalada en la retórica y en las acciones militares refleja la creciente tensión en la región, donde los hutíes han prometido continuar sus ataques en apoyo a los palestinos.
Abdul-Malik al-Houthi, líder de los hutíes, declaró: “Haremos todo lo posible contra el enemigo israelí y para apoyar al pueblo palestino. Nos enfrentaremos a cualquier apoyo estadounidense [a Israel] que implique atacar nuestro país”, según el sitio de noticias The New Arab. Estas afirmaciones subrayan la interconexión entre los conflictos en Gaza y Yemen, donde los hutíes se ven a sí mismos como defensores de la causa palestina.
La reciente ruptura del alto el fuego entre Hamas e Israel ha llevado a un aumento de la violencia, con el IDF reanudando sus bombardeos en Gaza y continuando su ofensiva terrestre. Desde el martes, las fuerzas israelíes han tomado el control del Corredor de Netzarim, situado al sur de la ciudad de Gaza, lo que indica una intensificación de las hostilidades en la región.