
La ciudad de Engels, en el centro de Rusia, ha sufrido uno de los ataques más severos hasta la fecha, según ha informado el gobernador Roman Busargin. Un hospital local ha resultado dañado en lo que se considera la mayor incursión de drones ucranianos en la zona.
Las autoridades han confirmado que el ataque también afectó a la capital regional, Saratov. En su cuenta de Telegram, Busargin compartió imágenes del hospital con ventanas rotas y reportó que una mujer había resultado herida. Además de los daños visibles, se descubrió una ruptura en una tubería de oxígeno, aunque el gobernador aseguró que los trabajos de reparación se llevarían a cabo rápidamente y se espera que estén finalizados para la tarde.
“Por el momento, los pacientes de emergencia están siendo redirigidos a otras instalaciones”, indicó Busargin, quien subrayó que el incidente “no afectará la calidad de la atención médica proporcionada en el hospital”.
Contexto del ataque y respuesta militar
Engels y Saratov se encuentran a más de 600 kilómetros de las zonas controladas por Ucrania, situadas a orillas opuestas del río Volga. En las afueras de Engels se localiza un aeródromo militar, lo que podría explicar la elección de este objetivo por parte de las fuerzas ucranianas.
El Ministerio de Defensa ruso ha informado que se interceptaron un total de 132 drones ucranianos en varias regiones, incluyendo 54 en la región de Saratov, 40 en Voronezh y 22 en Belgorod, entre otros. Este ataque se produce en un contexto de negociaciones para un alto el fuego parcial, que busca suspender los ataques a la infraestructura energética de ambos lados. Esta medida, promovida por el presidente estadounidense Donald Trump, tiene como objetivo facilitar las conversaciones de paz y establecer un cese al fuego más amplio.