En el contexto actual de volatilidad en los mercados financieros, los inversores están siendo llamados a reconsiderar sus estrategias. Según Alex Morris, director ejecutivo de F/m Investments, una opción a tener en cuenta es aumentar la exposición a los bonos, especialmente en el corto plazo, donde se vislumbra una «gran seguridad». Sus declaraciones fueron realizadas durante la conferencia Future Proof en Miami, un evento donde asesores financieros y ejecutivos de gestión de patrimonios intercambiaron ideas sobre tecnología y estrategias de inversión.
Morris destacó que el escenario económico y los riesgos asociados a políticas tarifarias son factores que justifican esta recomendación. «Si las políticas en Washington se mantienen como están, el corto plazo será un lugar ideal para invertir», afirmó, subrayando la importancia de los bonos en la configuración de una cartera diversificada.
La relevancia de los bonos en el panorama actual
Jeffrey Katz, director general de TCW, también presente en la conferencia, coincidió en que los bonos están desempeñando su función adecuada en el contexto de una cartera 60/40, donde el equilibrio entre acciones y bonos es esencial para mitigar riesgos. La firma de Katz ha lanzado el TCW Flexible Income ETF, un fondo que ha estado disponible desde noviembre de 2018 y que busca proporcionar a los inversores una forma de obtener ingresos fijos en un entorno incierto.
Recientemente, datos de FactSet han revelado que este fondo incluye en sus principales tenencias bonos del Tesoro de EE. UU. con rendimientos superiores al 4%, lo que lo ha llevado a recibir una calificación de cuatro estrellas por parte de Morningstar. Esta tendencia en el aumento de la rentabilidad de los bonos refleja una respuesta a las condiciones del mercado, donde la estabilidad se convierte en un valor apreciado en tiempos de turbulencia económica.
La búsqueda de alternativas seguras para la inversión es un tema recurrente, sobre todo cuando se observa la inestabilidad en el mercado de valores. La estrategia de apostar por los bonos, que tradicionalmente son considerados refugios en tiempos de crisis, se presenta como una opción lógica y prudente para muchos inversores que buscan proteger su capital frente a los desafíos globales actuales.
