
El 19 de marzo de 2025, la Agencia Espacial Europea (ESA) lanzó la primera tanda de datos de la misión Euclid, una iniciativa destinada a explorar la estructura del universo y su evolución. Este lanzamiento incluye un adelanto de los campos profundos del espacio, donde se han identificado cientos de miles de galaxias de diversas formas y tamaños, ofreciendo una visión inicial de su organización a gran escala en la red cósmica.
La primera entrega de datos abarca una vasta área del cielo dividida en tres mosaicos, incluyendo numerosos cúmulos de galaxias, núcleos galácticos activos y fenómenos transitorios. Además, se ha realizado la primera clasificación de más de 380,000 galaxias y 500 candidatos a lentes gravitacionales, resultado de la combinación de esfuerzos de inteligencia artificial y la participación de la ciencia ciudadana.
El potencial de Euclid en la exploración del universo
Según la directora de Ciencia de la ESA, la profesora Carole Mundell, Euclid se presenta como una máquina de descubrimiento excepcional. Con su capacidad para realizar un censo de galaxias a gran escala, la misión permitirá explorar la historia cósmica y las fuerzas invisibles que moldean nuestro universo. La entrega de estos primeros datos representa una valiosa oportunidad para que los científicos aborden algunas de las preguntas más intrigantes de la ciencia moderna.
En tan solo una semana de observaciones, la misión ha detectado 26 millones de galaxias, algunas de las cuales se encuentran a 10.5 mil millones de años luz. A lo largo de los próximos años, Euclid realizará múltiples pasadas sobre estas áreas, lo que incrementará significativamente la cantidad de galaxias observadas y mejorará la calidad de los datos obtenidos. Se espera que, al finalizar la misión en 2030, Euclid haya cubierto un tercio del cielo, equivalente a 14,000 grados cuadrados, proporcionando un atlas cósmico sin precedentes.
La misión Euclid tiene como principal objetivo medir con precisión la variedad de formas y la distribución de miles de millones de galaxias mediante su instrumentación de imagen de alta resolución. Las nuevas imágenes ya muestran la capacidad de Euclid para delinear la organización a gran escala de las galaxias en la red cósmica, un aspecto crucial para comprender la naturaleza del materia oscura y la energía oscura, que juntas constituyen aproximadamente el 95% del universo.
La combinación de inteligencia artificial y la colaboración de miles de voluntarios en proyectos de ciencia ciudadana ha sido esencial para clasificar la vasta cantidad de datos generados por Euclid. A través de algoritmos avanzados, se ha creado un catálogo inicial de más de 380,000 galaxias, lo que supone un avance significativo en la comprensión de la formación y evolución galáctica.
La misión también emplea el fenómeno del lente gravitacional, donde la luz de galaxias distantes se distorsiona por la presencia de materia normal y oscura en el primer plano. Esta técnica ha permitido identificar 500 candidatos a lentes gravitacionales, casi todos desconocidos hasta ahora, lo que abre nuevas vías para investigar la distribución de materia oscura en el universo.
Euclid promete revolucionar nuestro entendimiento del cosmos, no solo en el ámbito de la evolución galáctica, sino también en el contexto de la cosmología más amplia, abordando preguntas fundamentales sobre la naturaleza del universo. Con cada nuevo dato que se libera, se acerca más la posibilidad de resolver algunos de los misterios más profundos que nos rodean.